Prisión preventiva para dos carabineros acusados de cohecho reiterado y tráfico de bombas lacrimógenas

Carabineros de Chile
Imagen referencial.

Un tercer detenido -funcionario en retiro- quedó con las cautelares de firma mensual, arraigo nacional y prohibición de comunicarse con los coimputados en la causa. Se decretaron 100 días para la investigación.


Este miércoles, el Sexto Juzgado de Garantía de Santiago decretó la prisión preventiva para dos carabineros activos y uno en retiro, imputados por varios delitos, entre ellos cohecho reiterado y tráfico de elemento balístico, que en este caso corresponde a bombas lacrimógenas.

Los policías fueron detenidos durante un operativo en Maipú, donde se allanó una vivienda de uno de los sujetos en la Ciudad Satélite en el condominio Magallanes, tras una operación del Grupo de Operaciones Policiales Especiales (Gope) de Carabineros en el marco de una investigación por cohecho de la Fiscalía Centro Norte.

Uno de ellos, el cabo primero identificado con las iniciales D.E.U.M -que al momento de los ilícitos prestaba servicios en la comuna de Estación Central- se le acusa como autor de los delitos consumados de cohecho reiterado, infracción a los deberes del cargo y uso de documentación pública falsa.

Asimismo, el también cabo primero de la 37° Comisaría de Vitacura -señalado con las iniciales R.E.M.C- se le imputa por tráfico de elemento balísticos -bombas lacrimógenas- y tenencia ilegal de municiones.

Se decretó el ingreso de ambos al anexo cárcel de la Subcomisaría Pudahuel Norte por considerarlos un peligro para la sociedad y por el inminente peligro de fuga, decretando 100 días para la investigación.

El tercer detenido, identificado como F.A.R.O, fue imputado como autor del delito de tenencia ilegal de municiones, quedando con las medidas cautelares de firma mensual, arraigo nacional y prohibición de comunicarse con los coimputados en la causa.

El caso

Según la investigación liderada por la fiscal Tania Sironvalle, estos delitos se desarrollaron en marzo de 2022. D.E.U.M en una fiscalización realizada en Estación Central controló a un conductor que no portaba su licencia, pero omitió cursar la infracción a cambio del pago de $100 mil.

En ese contexto, D.E.U.M le preguntó al civil a qué se dedicaba y este le respondió al comercio ilegal de fuegos artificiales y cigarrillos, a lo que el cabo primero se ofreció como intermediario para conectarlo con un posible comprador de los cigarrillos a cambio del pago de $50 mil por cada caja que fuera comprada, lo que se concretó en diversas ocasiones tras dirigir la patrulla policial hasta un local de calle 5 de Abril y por lo cual el uniformado recibió varias transferencias bancarias.

Asimismo, se le acusa de hacer uso indebido de una patrulla policial, cuando prestó “servicios particulares” para vigilancia en una discoteca de Quinta Normal y recibió $40 mil. Al carabinero también se le registró su vehículo particular, encontrando documentación falsa del móvil.

En tanto, a R.E.M.C se le acusa que el 12 de septiembre de 2022 se contactó por teléfono con una tercera persona, a quien ofreció venderle una bomba lacrimógena. El policía retomó el contacto el 18 de octubre del año pasado, para coordinar la entrega del artefacto.

En un registro a la vivienda de R.E.M.C, en la calle Ramón Cruz, comuna de Macul, lograron encontrar e incautar una granada lacrimógena de mano y 13 cartuchos balísticos de diversos calibres.

Desde Carabineros, anunciaron el martes los procesos administrativos para desvincular a los funcionarios detenidos.

Mediante un comunicado la institución aseguró que “a raíz de una investigación judicial llevada a cabo por personal del Departamento de Asuntos Internos de la institución y la Fiscalía Centro Norte, se realizó una intervención policial en domicilios de funcionarios de carabineros que tendrían participación en hechos que revisten carácter de delito”.

“Paralelamente, Carabineros dio inicio a los procesos administrativos para desvincular de la institución a los involucrados”, agregaron para afirmar que “tal como ha sido nuestra política institucional, no aceptaremos conductas reñidas con los códigos de ética y doctrina que nos rigen”.

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