Alsacia es la primera firma que queda fuera de la licitación del Transantiago

El gobierno fijó posiciones ayer (martes) respecto de los requisitos técnicos que deberán tener las empresas para participar en la licitación del Transantiago, que se abrirá a finales de este año: deberán cumplir los indicadores mínimos de calidad para los usuarios y con un piso de recursos para operar sin problemas.

En este sentido, el Ministerio de Transportes afirmó que la empresa Alsacia, que posee el 11% de la flota del sistema, 33 servicios en la zona poniente de la capital y que debutó hace una década, no tiene el estándar requerido para este nuevo proceso, por lo que no podrá ser parte del proceso.

El gobierno planteó estas exigencias en las bases de licitación -que aún no han sido visadas por la Contraloría-. Allí se incluyen nuevas reglas, como que existan 1.550 buses nuevos, 19 recorridos adicionales y un piso de tres años de experiencia de la concesionaria. Además, a las empresas se les pagará de manera diferente: el 75% de los recursos será por kilómetro recorrido y un 25% de los fondos por persona transportada.

La ministra del ramo, Paola Tapia, sostuvo que Alsacia es la única empresa que no llega a un indicador clave: el de regularidad o tiempo de espera que tienen los usuarios en los paraderos. De las siete concesionarias del transporte capitalino, Alsacia llegó a un 78,6% de lo solicitado por la autoridad en 2016 (la exigencia es 80%). El resto de las empresas sobrepasa la meta, como es el caso de STP, con un 86,7% de regularidad (ver tabla).

Alsacia tiene una flota de 749 máquinas y junto a su socia Express son los mayores operadores del Transantiago, pues en conjunto poseen el 29% de los buses del mercado.

La secretaria de Estado aseguró que "hay muchas empresas que han hecho una muy buena gestión de sus servicios. En el caso de Alsacia, se encuentra bajo el 80%, que es el mínimo exigido, y esa es la razón por la cual no estaría la posibilidad de que postulen en el nuevo proceso de licitación".

Tapia agregó que "el índice que se está usando es objetivo, el que está previsto en los contratos. Si esas empresas no se preocuparon de rendir antes y dar espacio a las mejoras, evidentemente, tampoco es el momento ahora".

Eric Martin, secretario técnico de la licitación del ministerio, afirmó que se justifican estas normas, pues se requiere subir la calidad para "entrar a la cancha". Para esto, además de los parámetros de operación, se les pedirá un capital mínimo para postular de $ 5.332 millones.

Alsacia, junto con problemas de rendimiento, posee un déficit financiero. Los accionistas de la compañía concretaron una demanda contra el Estado de Chile, ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (Ciadi) este año, pues acusan al Fisco de no cumplir con los contratos. En paralelo, se acogió a la ex Ley de Quiebras, debido a que, según la firma, tienen un déficit financiero por las "omisiones" del gobierno. Dicen que se les han quitado servicios en forma "ilegal", los que fueron entregados a otras firmas.

Juan Carlos González, gerente de Transurbano, sostuvo que una de las dudas que surgen a raíz de este escenario es "si a las nuevas empresas participantes se les pedirá el cumplimiento de este indicador, pues no tienen experiencia en cuanto a regularidad".

¿Qué pasará con los conductores de la firma si ésta desaparece? No está claro, se explica al interior de la industria, aunque en el caso de que Alsacia se liquide, se nombraría un administrador provisional por parte de la justicia.

Rodrigo Martin, experto en urbanismo de la U. de Santiago, calificó como positiva la salida de la concesionaria. "Hay que subir la calidad y que haya mayor competencia, pues hoy la operación se concentra en apenas siete sociedades".

En cuanto a los plazos de la licitación, el ministerio dijo que el proceso se iniciará este trimestre, pero no entregó fechas específicas. Sin embargo, se espera que el concurso esté cerrado en marzo de 2018, antes de que asuma el nuevo gobierno.

Alsacia no se refirió a los dichos del gobierno. Sin embargo, hasta febrero pasado había planteado que tenía la intención de ser parte de la convocatoria. "Nuestra intención es participar. Lo venimos haciendo por más de 10 años y queremos seguir haciéndolo", señalaron en esa ocasión.

Desde Transportes, además, informaron que existe interés de varios operadores extranjeros, tanto europeos como de Australia y México, en participar en el proceso. Además, se está preparando la licitación de los sistemas tecnológicos (la nueva tarjeta bip!), la que se llevará a cabo en 2019.