Así llega San Lorenzo, un Ciclón obligado a ganar en San Carlos

La Copa Libertadores ha sido un dolor de cabeza, hasta ahora, para San Lorenzo de Almagro. Luego de dos jornadas, son colistas del grupo 4, sin puntos. Por ello, el juego de mañana ante Universidad Católica es vital para las aspiraciones del Ciclón, campeón del máximo certamen continental de clubes en 2014 (con el cruzado Enzo Kalinski en su plantel).

San Lorenzo viene de ganarle 1-0 a Sarmiento, por el torneo local, aunque se perdieron muchos goles y dejaron dudas en su juego. Su entrenador, el uruguayo Diego Aguirre, es consciente de aquello. "Hay que seguir generando situaciones y ojalá el miércoles estemos más firmes y podamos concretar los goles. Tenemos un partido crucial. Tengo la esperanza de que estaremos a la altura y que los jugadores responderán. Si esta semana no respondemos como tenemos que hacerlo podemos quedar lejos de todo", dijo el DT charrúa tras la victoria del sábado.

¿Cómo llega a Santiago el rival de la UC? Pese a que son terceros en la liga argentina (con 37 puntos), el 2017 ha sido muy irregular. De siete partidos oficiales han perdido cuatro, recibiendo 12 goles en su arco. Tienen una defensa con valores experimentados, como Marcos Angeleri, Fabricio Coloccini y Matías Caruzzo, y la presencia del chileno Paulo Díaz se asoma como fija (de a poco se ganó un puesto en la estelaridad) pero una de sus dudas son los laterales. Por la izquierda, Aguirre ha probado con el propio Díaz y con el joven Gabriel Rojas. El ex Palestino jugó ante Flamengo, en Brasil, como lateral derecho y frente a Atlético Paranaense, de local, por el otro costado. Todo, buscando al sustituto ideal del seleccionado Emmanuel Más, quien se fue a Turquía. Otros valores importantes que abandonaron el club son el volante Sebastián Blanco y el artillero Martín Cauteruccio.

El dibujo táctico matriz de Aguirre es el 4-1-4-1, con el inamovible Sebastián Torrico bajo los palos. El volante que se para delante de la línea defensiva es Franco Mussis, quien también se apoya en Néstor Ortigoza, de labor mixta y dueño de los lanzamientos penales en San Lorenzo, y en el talentoso Fernando Belluschi. Por afuera cuentan con volantes de mucho recorrido, como Ezequiel Cerutti y Rubén Botta. Su carta de gol es Nicolás Blandi (suma ocho tantos en el campeonato transandino), y su alternativa es Gonzalo Bergessio.

San Lorenzo es un equipo que apuesta por la posesión de balón, aunque eso muchas veces no significa nada. Prueba de ello es que en su anterior presentación por la Libertadores, la derrota 0-1 con Paranaense en el Nuevo Gasómetro, tuvo una posesión del 64,4 por ciento en el partido (18 remates, seis al arco).

"La idea de juego es siempre la misma. Estamos todos trabajando para encontrar la regularidad que necesitamos. Los partidos de la copa son difíciles, sobre todo de visitante", dijo el golero Sebastián Torrico antes de embarcarse hacia Chile. En el club del Papa Francisco son conscientes de la relevancia del choque ante el bicampeón nacional. Una nueva derrota sería lapidaria.