Bottas para escalar
El finlandés fue cuarto hace tres carreras y luego, tercero, segundo y ganador ayer en Spielberg, en una prueba donde los pilotos llevaron los neumáticos al límite.
El finlandés Valtteri Bottas ganó el Gran Premio de Austria de la Fórmula Uno, el segundo triunfo de su carrera en la máxima categoría, luego de lo hecho en Rusia hace unas semanas. La prueba estuvo marcada por los problemas con la degradación de los neumáticos.
El finés era el poleman de la fecha y esa ventaja la hizo patente en el mismo momento en que se apagaron los semáforos en Spielberg. Tanto, que los jueces lo investigaron durante largo rato por una supuesta partida adelantada. Nada mostraban las imágenes y, seguramente, nada tampoco los sensores, por lo que no hubo penalización.
"Hice la salida de mi vida", declararía más tarde el finlandés.
La salida no sólo llamó la atención por el escape de Bottas, sino también por Max Verstappen, que se quedó pegado en la partida, y el accidente en los primeros metros, que sacó a Fernando Alonso (McLaren) de carrera.
Buena partida de Lewis Hamilton también, pues se puso sexto y partía octavo.
Pero Bottas lideraba tranquilo, hasta la vuelta 42, cuando una mala parada en pits puso en riesgo la victoria, pues volvió a pista entre los dos Ferrari. En la 44 recuperó su posición de privilegio: los del Cavallino no pudieron sacar ningún provecho.
Poco variaron las ubicaciones durante la fecha, donde el estado de los neumáticos fue clave. Muy dañados, la incertidumbre entre cuidarlos y acelerar puso la nota de emoción hasta la última recta de la carrera. Las ampollas en el caucho los hicieron sufrir a todos y aunque Hamilton atacó a Ricciardo no pudo subirse al podio.
"Al principio controlé muy bien el ritmo, pero luego las cosas se pusieron difíciles, así que estoy muy contento con esta victoria, que es mi segunda en Fórmula Uno", manifestó Bottas.
Sobre sus opciones de desbancar a alguno de los dos protagonistas de la temporada, Hamilton o Vettel, señaló: "Aún queda mucho por hacer este año. Hemos sumado unos buenos puntos, pero estamos progresando. Aún no hemos llegado ni siquiera a la mitad de la temporada. Yo creo y el equipo cree. Aún estamos desarrollando el auto, que puede evolucionar".
Tras abandonar en España, Bottas ha tenido un rendimiento ascendente (ver tabla), que coronó con el triunfo en el Red Bull Ring.
Hamilton, por su parte, se declaró conforme con haber subido cuatro lugares (largaba desde la octava casilla, penalizado por el reemplazo de la caja de cambios). "Fue un fin de semana difícil, pero limité daños respecto a Sebastian (Vettel) en cuanto a pérdida de puntos, al avanzar puestos. No creo que hubiese podido hacer mucho más, salvo que quizá fui demasiado amable con Daniel (Ricciardo) y le dejé demasiado espacio. No lo volveré a hacer".
Vettel declaró que "con una vuelta más, hubiera ganado la carrera. Con los neumáticos superblandos fui recortando distancias; pero él aguantó y ganó".
La próxima carrera es este mismo domingo, en Silverstone.
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