Cadena de atentados deja al menos 38 muertos en Pakistán




Al menos 38 personas perdieron hoy la vida en una serie de ataques coordinados perpetrados por talibanes en la ciudad de Lahore, la segunda más importante de Pakistán, y en un atentado suicida ocurrido en el noroeste del país.

En Lahore grupos de insurgentes talibanes ataviados con chalecos explosivos atacaron de forma coordinada tres comisarias de la policía. Según fuentes oficiales, en estos ataques murieron 26 personas, entre ellas 10 talibanes.

En el cuartel regional de la Agencia de Investigación Federal, situada en el corazón de Lahore, la capital de la provincia de Punjab, murieron cuatro funcionarios, dos civiles y un insurgente. En un centro de formación policial perdieron la vida cinco agentes, tres civiles y cuatro extremistas, mientras que en un centro de entrenamiento para comandos especiales se encontraron los cadáveres de un policía, un civil y cinco atacantes.

Los talibanes asumieron la autoría de esta serie de atentados. Según un portavoz, los atentados fueron perpetrados por la organización "Tehrik e Taliban Punjab", una facción regional del movimiento talibán de Pakistán.

Un portavoz de la policía aseguró que las fuerzas de seguridad consiguieron controlar la situación pocas horas después de que se cometieran los ataques, en torno a las 8 de la mañana.

Por otro lado en la ciudad de Kohat, al noroeste del país, murieron 11 personas y al menos otras 30 resultaron heridas cuando un atacante suicida estrelló en una estación policial el vehículo en el que viajaba cargado de explosivos. Además, en Peshawar, capital del noroeste, un niño murió a causa de la explosión de un coche bomba en una zona residencial.

"Prometo que haremos todo lo necesario (contra los insurgentes)", dijo hoy el ministro de Interior Rehman Malik.

El gobierno de Pakistán prepara estos días una nueva gran ofensiva contra los talibanes en Waziristán, donde en agosto una ataque estadounidense acabó con la vida del jefe de los talibanes paquistaníes, Baitullah Mehsud, cuyos seguidores prometieron vengar su muerte.

En la última semana Pakistán se ha visto sacudido por varios atentados suicidas que han dejado tras de sí más de 120 muertos

. El fin de semana 20 personas murieron cuando insurgentes talibanes asaltaron el cuartel general de Rawalpindi y mantuvieron a una docena de rehenes retenidos durante más de 20 horas. Además, el lunes más de 40 personas perdieron la vida en un atentado en el noroeste del país.

También Lahore fue ya duramente golpeada por ataques terroristas en lo que va de año. A finales de mayo más de 20 personas perdieron la vida y 250 resultaron heridas en un atentado suicida contra una comisaría.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.