Caso Odebrecht se agrava en Perú con investigación a ex presidente Toledo

Los escándalos de corrupción que involucran a la constructora brasileña Odebrecht siguen dejando estragos en la política peruana. En la mira se encuentra en estos momentos el ex presidente de Perú, Alejandro Toledo (2001-2006) a quien la fiscalía investiga por presuntamente recibir sobornos de la empresa para permitir la construcción de la carretera Interoceánica Sur, que une a Perú con Brasil.

La compañía brasileña se ha visto involucrada en el mayor escándalo por sobornos de la historia de Brasil y que ha involucrado a distintos países de América Latina.

Según el diario local El Comercio, el mandatario habría recibido US$ 20 millones en 2005 por parte de la constructora a cambio de asegurarse la licitación de la carretera. Según publica ese medio, la fiscalía ya ha rastreado US$ 11 millones del total en pagos ilegales de Odebrecht a cambio de la adjudicación de los tramos dos y tres de esa carretera.

En 2004 Toledo habría participado personalmente en la sesión de la agencia gubernamental Pro Inversión, donde se habría gestado el marco legal para la licitación de esos tramos.

Este sábado la fiscalía allanó la casa de Toledo ubicada en un barrio residencial limeño, por más de nueve horas y anunció que "la documentación hallada en la vivienda será evaluada por el Ministerio Público".

Según especula la prensa peruana, este lunes el fiscal Hamilton Castro podría solicitar prisión preventiva para el ex mandatario, que vive en Europa. Su abogado Luciano López, que trabajaba con Toledo desde 2013, renunció el viernes abruptamente y sin dar motivos, a seguir siendo parte de su defensa.

Toledo negó "absoluta, rotundamente" todas las acusaciones en una conversación telefónica con El Comercio. "Yo no tengo nada (…) busquen mis cuentas, por favor", dijo desde París, donde reside.

En diciembre el Departamento de Justicia de Estados Unidos informó que la compañía brasileña reconoció haber realizado sobornos por US$ 29 millones a funcionarios peruanos para ganar las licitaciones de distintas obras públicas entre 2005 y 2014.

Según reveló la prensa peruana, el ex director de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, habría confirmado a la fiscalía el soborno de US$ 20 millones entre 2005 y 2008, a través de la cuenta de un amigo de Toledo, el empresario Josef Maimam.

El actual Presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, quien fue ministro de Economía de Toledo, prometió que su gobierno iba a colaborar con la investigación. "La justicia debe ser igual para todos. Si alguien cometió actos de corrupción, debe ser sancionado. He ordenado al Poder Ejecutivo colaborar con todo lo necesario para garantizar que la investigación sea eficaz. Corrupción nunca más", escribió el mandatario a través de la red social Twitter.

El escándalo de corrupción ya ha salpicado a tres gobiernos peruanos. No sólo Toledo ha recibido acusaciones que lo involucran con el caso Odebrecht, sino que también el ex presidente Alan García (2006-2011). Tres de sus ex funcionarios ya han sido apresados por este caso.

Por otro lado el ex mandatario Ollanta Humala (2011-2016) también está siendo investigado junto a su esposa, Nadine Heredia, por presuntos pagos ilícitos a sus dos campañas presidenciales, en 2006 y 2011, a través del Partido Nacionalista Peruano.

También la semana pasado el gobierno peruano decidió cancelar el contrato para construir el Gasoducto del Sur, inversión evaluada en más US$ 7.000 millones, e impuso una multa millonaria por incumplimiento al consorcio a cargo del proyecto, que era liderado por Odebrecht. La empresa no logró conseguir el financiamiento-y tampoco vender su participación, necesario para completar la obra, que iba a ser una de las mayores inversiones en infraestructura de la historia del país.