Cazadores de noticias y adolescentes americanos: el cine indie que llega a Chile

Lou Bloom no tiene educación formal, pero aprende rápido, como él mismo acostumbra decir. Desempleado en una ciudad de 10 millones de habitantes, Bloom cree haber encontrado el empleo que lo sacará de la miseria y le dará la notoriedad que  merece: con una cámara de segunda mano, y a bordo de un viejo Toyota Tercel, se dedica a filmar escenas de sangre y crimen en las peligrosas noches de Los Angeles. Luego, antes del amanecer, las vende como pan recién salido del horno a los noticieros más hambrientos de la TV local.

En tiempos en que la principal fuente del periodismo amarillo son los reveladores videos aficionados de noctámbulos anónimos, Bloom es  un adelantado. Su capacidad de trabajo es infinita, su moral no existe y su cerebro es el de un sociópata. En el otro extremo de la cadena, la jefa de un noticiero sensacionalista es su principal cliente. Ambos sn los protagonistas de Primicia mortal, una de las películas mejor criticadas en el último Festival de Toronto. Con estreno agendado en Chile para el 18 de diciembre, la cinta de Dan Gilroy está además nominada a dos premios Gotham, uno de los más importantes del cine independiente estadounidense junto a los Independent Spirit Awards.

El filme protagonizado por Jake Gyllenhaal, como el desequilibrado cazanoticias, y Rene Russo en el rol de la editora periodística Nina Romina, es parte de un grupo importante de cintas de la industria independiente -o indie- que llegan a Chile en los próximos meses. Casi siempre con actores conocidos y aceptación de la crítica, son películas que además entran en la carrera paralela por el Oscar. Este año, sin ir muy lejos, El club de los desahuciados se llevó tres estatuillas sin haber salido de alguno de los grandes estudios y habiendo costó sólo cinco millones de dólares.

En una órbita muy distinta se mueve  Boyhood, la nueva obra de Richard Linklater (Antes de  la medianoche). Filmada entre  2002 y 2013, registra la  infancia y adolescencia de Ellar Coltrane, cuya vida es transformada en una ficción  por Linklater. Primero están las reyertas del colegio, luego vienen los intereses por las chicas y finalmente el momento de entrar a la universidad. A Ellar Coltrane, que interpreta en la ficción a un chico llamado Mason, lo acompañan Ethan Hawke, en el rol de su distante padre divorciado, y Patricia Arquette como su acontecida madre. La película es uno de los estrenos mejor criticados del año, una cumbre en la carrera de Linklater y un experimento triunfal en la mezcla de las experiencias reales con las ficticias. "Mientras hacíamos la trilogía de Antes del amanecer, Antes del atardecer y Antes de la medianoche, pensé que Richard me había llevado al límite. Sin embargo, Boyhood, que fue hecha en nuestros ratos libres durante 45 días de 12 años, es un salto sin precedentes", afirmó Hawke al portal de cine Indiewire.

Ganadora del último Oso de Plata a Mejor Director en el Festival de Berlín, Boyhood tiene fecha de estreno en Chile el 26 de febrero. Fue producida por la compañía neoyorquina IFC Films, que aportó 200 mil dólares anuales durante todo el tiempo de rodaje.

También de crecimiento personal, aunque bajo el látigo del rigor, asoma Whiplash, filme que ganó Sundance 2014 y que, al igual que Primicia mortal, es producida por la compañía Bold Films. La película, que llega a salas el 18 de diciembre, es del  debutante Damien Chazelle, quuien  un año antes había hecho un cortometraje con esta misma historia. Protagonizada por Miles Teller en el rol del joven y tenaz baterista Andrew Neiman, Whiplash es un relato de ambición, exigencia y algo de sadismo. El villano de la trama, si es que  se puede llamar así, es el profesor Fletcher, un maestro demandante y algo perverso, capaz de golpear a  los aspirantes demasiado seguros de sí mismos, como Andrew.

Película de ritmo trepidante y elogiada por las actuacines de Teller y J.K. Simmons como Fletcher, Whiplash también ha sido comparada con un buen drama deportivo. O, yendo más lejos, a un filme de reclutas antes de ir a la guerra: la disciplina y la exigencia que Fletcher antepone a las habilidades de Neiman tienen la misma urgencia que los modales de un sargento ávido de víctimas.