Chile entre los tres países de América con menos muertes por maternidad

Esta semana la ONG Save the Children publicó el informe "Estado Mundial de  Madres 2015", un ranking en el que compara y analiza datos de salud y bienestar de madres y niños en 179 países. Según este documento, Noruega es el mejor país para ser madre, mientras Chile ocupa el lugar número 48 a nivel mundial y cuarto si sólo se considera a Sudamérica, tras Argentina (36), Cuba (40) y Costa Rica (45).

Uno de los parámetros mejor reportados por el país es la tasa de mortalidad en niños menores de cinco años, donde se ubica en el segundo puesto , sólo superado por EE.UU. y Cuba.

Respecto al riesgo de muerte materna, es decir, aquella que ocurre durante el embarazo, el parto o poco después del nacimiento del niño, Chile ocupa el puesto 55 a nivel mundial, pero el tercero del continente, sólo superados por Canadá y Uruguay.

Estadísticamente, las mujeres en Chile enfrentan un riesgo de 1 en 2.400 casos de morir de una causa materna (embarazo o el parto). "Esto es más bajo que el riesgo de las mujeres estadounidenses (1 en 1.800) pero mayor que el riesgo que enfrentan las mujeres en todos los demás países de altos ingresos de la OCDE", explican desde  Save the Children a La Tercera.

"Esto no significa que Chile no ha recorrido un largo camino. El país ha realizado mejoras en la salud materna. En 1990, el riesgo de morir por causa materna era de 1 en 610 casos. En el año 2000 fue de 1 en 1.600. La razón de mortalidad materna, se redujo en 60% entre 1990 y 2013. Este es uno de los mayores beneficios observados en la región; sólo Uruguay (reducción del 67%), Perú (64%) y Bolivia (61%) hicieron más progresos", señalan desde la ONG.

Bajar los índices de mortalidad materna no es tarea fácil dice Claudio Vera, gineco obstetra de la Red Salud UC Christus. "Si bien se ha reducido en forma importante las muertes asociadas a hipertensión arterial y aborto, la causa que ha aumentado en mayor proporción son otras enfermedades maternas concomitantes como, por ejemplo, enfermedades crónicas (hipertensión arterial crónica, diabetes, obesidad y otras)", dice.

Francis Valverde, directora ejecutiva de la Asociación Chilena Pro Naciones Unidas (Achnu), explica que faltan datos sobre qué mujeres son las que más mueren por causa asociadas a la maternidad, si son adolescentes o mujeres mayores o a qué estrato socieconómico pertenecen. Tampoco hay cifras claras sobre el aborto, porque éste es clandestino y es de un alto riesgo para la salud de las mujeres, pero no está especificado. Si tuviéramos esos datos, cree, que se podría analizar mejor cómo reducir las cifras de mortalidad materna en el país.

Respecto de la salud infantil y el riesgo de morir antes de los cinco años, Valverde menciona que además  de cuestiones sanitarias, uno de las causas de la mortalidad en este grupo son los accidentes caseros, una situación que a su juicio está relacionada con la falta de salas cuna y jardines infantiles apropiados. "El tema no es sólo cómo las salas cuna y los jardines infantiles responden a la expectativa de los padres y madres cuando tienen que trabajar. Sino que los adultos valoren la participación de niños o niñas, todavía hay familias que creen que es mejor dejar a los niños el mayor tiempo posible en casa", indica Valverde.

INGRESOS Y EDUCACION

En esta versión 2015, el informe también elabora un ránking con el ingreso per cápita anual de las población. Chile aparece con 15.230 dólares, el cuarto más alto del continente, sólo superad por EE.UU., Canadá, Bahamas y Trinidad y Tobago.

FUERZA LABORAL

En Chile, en la década de los 90, apenas el 30% de la fuerza laboral estaba constituida por mujeres. Hoy es casi la mitad. Esta mayor incorporación al mundo del trabajo que podría explicar el ingreso per cápita que recoge el informe pero que no se traduce ni en participación ni en sueldos iguales al de los hombres, dice Valverde. "En Chile las mujeres todavía ganamos 35% menos que los hombres, aunque realicemos el mismo trabajo. Los que detentan el poder siguen siendo los hombres, en los partidos políticos, en el parlamento", dice y esta misma situación explicaría por qué no hay mujeres en el gobierno (ver nota secundaria).

La mayor participación laboral femenina va de la mano del mayor nivel educativo de las mujeres, cree Carina Lupica, especialista en género y trabajo y directora ejecutiva y académica de la Fundación Observatorio de la Maternidad en Argentina. Un informe elaborado por ella, menciona que las chilenas laboralmente activas tenían en promedio 12 años de estudio. Algo similar menciona el informe de Save the Children, que dice que la expectativa de estudios formales para las chilenas es de 15,2 años. En ambos casos, uno de los los más altos de América Latina. En el mismo informe de Lupica, nuestro país también figuraba como el tercero con más mujeres con ingreso propio, tras Uruguay y Argentina.

Para Xavier Oriol, doctor en psicología y profesor asociado de la Facultad de Administración y Economía de la U. de Santiago el nivel de sueldos de las mujeres en Chile es menor al de los hombres, por lo tanto, "a pesar que los niveles educativos sean altos, existe todavía una importante diferencia respecto a la retribución económica que perciben los hombres".

A nivel general, son los países nórdicos los que obtienen los primeros lugares en este informe según criterios de salud materno infantil, educación, nivel de  ingresos y participación política de las mujeres. Pero no es casualidad. Según Oriol, son los Estados que permiten mayores permisos de maternidad y paternidad los que están más arriba en el ranking y son precisamente países como Noruega, Finlandia o Islandia. En Chile, "existe todavía una desigualdad importante por razón de género a nivel laboral, y además faltan políticas de conciliación de la vida laboral y familiar que favorezcan la trayectoria profesional de las mujeres y que contribuyan a que los índices aumenten" dice Oriol.