Copa Davis: La dupla del futuro se estrena en casa

Una potente señal de lo que quiere para el equipo dio Nicolás Massú al determinar que Gonzalo Lama y Christian Garin fueran los singlistas ante Paraguay en desmedro de Paul Capdeville.

"Es una buena oportunidad para que ganen en Chile y tomen confianza pensando en el futuro. Paul venía saliendo de una lesión y creo que es muy importante en el dobles", explicaba el capitán sobre la decisión tomada en conjunto con su asesor, Marcelo Ríos.

En este sentido, ambos singlistas creen que un triunfo jugando de local es el empujón necesario para dar un posterior salto en la Copa Davis y en sus carreras.

"Este tiene que ser nuestro envión, porque no merecemos estar aquí en el Grupo II. Incluso, creemos que en el Grupo I hay rivales que son inferiores a nosotros", afirma Lama, quien abrirá la serie ante Juan Borba.

En lo personal, agrega que "haber perdido frente a Barbados me afectó demasiado y sólo hace unas semanas pude retomar mi nivel. Por eso, quiero ganar y seguir con mucha confianza".

Garin, quien enfrentará a Gustavo Ramírez, señala que "ganar es lo que me falta para dar el salto. Estoy seguro de que si hago las cosas bien lo voy a conseguir.  Y, para eso, tengo todo el apoyo del equipo".

Asimismo, las dos promesas nacionales tienen una sensación especial, pues la serie se jugará en el Club Palestino, lugar donde se formaron como tenistas.

"Conozco muy bien la cancha, porque pasé muchos años aquí. Además, estoy contento porque mi familia, mis amigos y mis seres queridos me podrán ver jugar. Por eso, para mí esta copa es la más especial", revela el jugador de 17 años.

El "León" Lama, en tanto, apunta que "es una linda sensación, porque aquí gané mi primer título profesional y porque durante muchos años, tanto Christian como yo, jugamos aquí".

El lugar que nadie quiere

Si bien en teoría se ve poco probable, una derrota condenaría a Chile al Grupo III de la Zona Americana, un lugar que Paraguay conoce muy bien, pues el año pasado jugó ahí.

Gustavo Ramírez, primer singlista "guaraní" y capitán del equipo que logró el ascenso en La Paz, Bolivia, relata que "es una zona rara y fea, porque se juega durante una semana todos contra todos, divididos en grupos, al mejor de tres sets y sólo tres partidos por confrontación. El formato es muy parecido a un Sudamericano de tenis y los dos finalistas ascienden. Es algo que no se lo doy a nadie".

El equipo visitante recibió ayer en la tarde a Fernando González, quien es amigo de Ramón Delgado. Además, compartieron con Marcelo Ríos. "Nos encontramos en el estacionamiento con el 'Chino' y le pedimos una foto. Fue un honor conocer a un ídolo", confiesa Ramírez.