Cuatro de cada 10 empleados no confía en sus compañeros

<font face="tahoma, arial, helvetica, sans-serif" size="3"><span style="font-size: 12px;">Ni secretos ni cuánto ganan ni temas personales. Los  chilenos no están dispuestos a compartir estos asuntos con sus compañeros de trabajo. Eso sí, pierden el miedo a la hora de expresar una idea.</span></font>




La desconfianza ronda por las oficinas. ¿La razón? El "chaqueteo", principalmente. Y la envidia, aunque en menor grado. Eso fue lo que contestaron los 500 empleados chilenos (entre 18 y 50 años) encuestados por el portal de empleos Bumeran.com, que midió el grado de confianza que tienen los empleados con respecto a sus compañeros de trabajo.

De acuerdo con los resultados del estudio de la multinacional con sede en el país, ante la pregunta "¿Confía en sus compañeros de trabajo?", el 39% de los consultados respondió que no. La cifra, aunque no lo parezca (el 61% contestó que sí confiaba), puede llegar a ser determinante en un ambiente laboral con algún tipo de problema. "Quien no confía en sus compañeros puede contagiar con sus prácticas a los demás, generando un ruido tal que impida el cumplimento de objetivos en el grupo y en la empresa", dice Francisco Ruiz, gerente general de Bumeran.com.

¿Y por qué no confían? Porque aunque los empleados chilenos tienen facilidad para hacer amistades, cuidan bastante su vida personal. Lo dice Ruiz ("no comentan aspectos privados porque culturalmente se tiende a separar lo propio de lo del trabajo") y los consultados, que al momento de detallar cuáles son los  aspectos en que no confían, es decir, qué no están dispuestos a contarles a los demás, mencionan en primer lugar (24%) "contar sobre mi vida personal", y en segundo término (23%) "confiar un secreto". Luego aparecen (20%) "hablar sobre mi sueldo" y "comentar sobre las tareas asignadas por el jefe".

LAS IDEAS SON DE TODOS

¿Desconfiados? Sí, pero no de todo. La vida privada queda fuera de la oficina, ya está dicho, pero una vez adentro, un buen porcentaje (el 46%) está dispuesto a compartir alguna idea que tenga que ver con su labor. "En nuestro país encontramos mayoritariamente una cultura organizacional donde el flujo de ideas es vital", explica Ruiz.

Y esa mirada tiene correlación con los resultados del estudio: cuando se les pregunta por la forma en que trabajan, prácticamente todos (95%) reconocen estar acostumbrados a realizar sus tareas en equipo. Aunque esto no necesariamente es lo que prefieren. Un 40% se inclina por este tipo de trabajo, en cambio, a más de la mitad le da lo mismo hacerlo solo o en conjunto.

Tanta indiferencia podría responder a que -dicen- uno de los aspectos negativos del trabajo es que sienten que tienen que "cuidar sus espaldas": el 49% considera que en sus empresas hay demasiada competencia. De acuerdo con los especialistas, la explicación podría ser de orden cultural: el "chaqueteo". Es decir, la misma causa por la que no les cuentan sus cosas personales a los compañeros de trabajo es la que los hace pensar que existe una competencia desmedida.

La única forma de revertir ese ambiente, explica el ejecutivo de Bumeran.com, es modificar paulatinamente el clima laboral. "Lo que importa es promover mejores climas laborales, fomentando las relaciones humanas y las tareas en equipo. De este modo, la confianza será una consecuencia natural que a la larga asegurará un resultado final mejor logrado", añade Ruiz.

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