Director Instituto de Cs. Política de la Universidad de Dresde: "La gente no protesta contra los inmigrantes, sino que contra la inmigración"

El doctor Werner J. Patzelt explicó a La Tercera que los manifestantes están en contra de la falta de consistencia alemana, su política de integración y sostenibilidad de inmigración.




¿Qué me podría decir sobre los últimos eventos en ciertas partes de Alemania, como en Dresde, donde se han realizado manifestaciones contra los inmigrantes?

De hecho, la gente no está protestando contra los inmigrantes, sino que contra la inmigración, y ni siquiera contra la inmigración como tal, sino que contra la falta de consistencia de Alemania y su política de integración y sostenibilidad de inmigración. En 2014, Alemania fue el segundo país que recibió más inmigrantes a nivel mundial (después de Estados Unidos) e incluso es el que tiene más personas en busca de asilo. Con estos antecedentes hay un aumento -pero por lo general no bien articulado- de personas que sienten que si Alemania continúa con su actitud tradicional de laissez faire hacia la inmigración, no llegará a un buen lugar. Dado que la clase política está dividida con esta interrogante y que no parece reflejar las distintas opiniones de la gente, ha habido un embotellamiento en el discurso y en la forma de hacer la política. Yo creo que el poder que existe detrás del movimiento Pegida en Dresde ha comenzado a gatillar una nueva ronda de discurso público en la inmigración y en las políticas de integración.

¿Cree Alemania es un destino tan atractivo para los inmigrantes debido a sus políticas integracionistas?

Alemania es atractiva ya que es una sociedad abierta, receptiva y adinerada.  En otras palabras, las condiciones de vida Alemania funcionan como un importante efecto que juegan a favor de la inmigración. Alemania ofrece, en comparación a otros países, condiciones de vida por sobre la media para los refugiados y quienes buscan asilo. No posee barreras concretas contra los inmigrantes, y no utiliza medidas efectivas para sacar del país a los que no tienen un estatuto legal.

Con la crisis en Medio Oriente ha surgido un gran número de inmigrantes ilegales en países como Italia. ¿Qué debería hacer Alemania al respecto teniendo en cuenta que es el pilar de le economía de la Unión Europea?

Debido a que no existen controles fronterizos alrededor de Alemania, ni políticas efectivas en países como Italia para mantener a los inmigrantes fuera de sus propias fronteras, Alemania no tiene más opción que aceptar que los inmigrantes y refugiados vayan hacia el norte, y en especial a países como  Alemania y Suecia. Esa es la razón de por qué muchos alemanes sienten que esta es una situación injusta. Y debido a que los gobiernos alemanes a nivel estatal tratan de obtener presupuestos balanceados, el dinero que necesitan para que los inmigrantes vivan y se integren debe ser sacado del total del ingreso estatal, por ejemplo, de sus impuestos. En una situación donde hay un incremento de inequidad entre los más ricos y los estratos más pobres de la sociedad alemana, no es una sorpresa que las clases más bajas se preocupen por este tipo de conflicto de distribución y expresen sus preocupaciones.

¿Qué medidas debería tomar Merkel para prevenir este tipo de tendencias xenófobas?

Primero, el sentimiento expresado por los manifestantes no debería ser considerado simplemente como "xenófobo". Ciertamente hay algo de xenofobia. Pero mucho más importante es el sentimiento generalizado de que las cargas de la inmigración no están siendo compartidas de forma justa, ni dentro de la Unión Europea, ni dentro de la sociedad alemana, y que existen oportunistas que el gobierno debería tratar de controlar. Segundo, el interés de muchos ciudadanos de evitar las transformaciones culturales en sus mundos no debería ser denunciado simplemente como "nacionalista", sino que debería ser discutido como uno dentro de los muchos intereses legítimos de la gente. Tercero, hay una discusión abierta en los principios, los lineamientos y las reglas del juego en la inmigración e integración que deberá ser conducida a nivel local y nacional. A nivel local, esto compete a las preguntas prácticas de cómo viven y la integración de los refugiados. A nivel nacional, el gobierno debería comenzar el proceso de una ley federal en inmigración e integración que sea discutida públicamente y adoptada por el Parlamento. Al final de tales deliberaciones y legislaciones, Alemania podría tener una política sustentable de inmigración e integración, basada en un amplio consenso popular.

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