Dos turistas terminan desayunando sorpresivamente con los Obama
Harvey y Paula Darden se presentaron equivocadamente un día antes para efectuar una visita a la Casa Blanca que les había arreglado un legislador de su distrito.
Una pareja de Georgia que se presentó por equivocación un día antes para una visita a la Casa Blanca recibió inesperadamente una invitación para desayunar con el presidente Barack Obama y la primera dama.
No fue una cena estatal, pero dejó una vez más a la Casa Blanca en la posición de explicar cómo personas que no estaban en una lista de invitados fueron autorizadas a entrar en la mansión presidencial.
Esta vez, las autoridades de la Casa Blanca dijeron que sólo se trató de un gesto de hospitalidad.
La inusual aventura de Harvey y Paula Darden, partidarios de Obama de Hogansville, Georgia, ocurrió el Día de los Veteranos, dos semanas antes de que Tareq y Michaele Salahi, de Virginia, se colaran en la cena oficial ofrecida por Obama al primer ministro de la India.
Los Darden se presentaron equivocadamente un día antes para efectuar una visita que les había arreglado un legislador que representa a su distrito.
La Casa Blanca y el Servicio Secreto dijeron que la pareja pasó por todos las revisiones de seguridad y que fueron autorizados a participar en el desayuno como cortesía porque no había visitas públicas el día de su llegada.
La explicación sorprendió a Harvey Darden, de 67 años, farmacéutico retirado, quien dijo que él y su esposa pensaron que estaban empezando su gira y que no les dijeron sobre el cambio hasta que los condujeron a una sala, les ofrecieron un bufet y les dijeron que los recibiría el presidente.
"Mientras más nos internábamos en la Casa Blanca, más sorprendidos estábamos", dijo Darden a la Associated Press en una entrevista telefónica. "Mi esposa me miraba a mí y yo la miraba a ella, y me decía 'no sé si estamos en donde debemos'".
Se acercaron a un empleado de la Casa Blanca para decirle preocupados que pensaban que se habían desviado, pero les dijeron que siguieran, comentó.
"Me sentí un poco extraño porque yo era el único hombre en la habitación que no estaba de terno y corbata", agregó. "Yo era un mero turista".
Como los Darden pasaron los exámenes y control de antecedentes del Servicio Secreto, se les permitió asistir al desayuno para veteranos como un "gesto amistoso", dijo el vocero de la Casa Blanca Nick Shapiro. Agregó que no es inusual que se invite a personas para giras u otros eventos cuando hay lugar.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.