Eduardo Engel, director de Espacio Público: "Falta por avanzar en temas como las asignaciones parlamentarias"

La vista completamente despejada al cerro Santa Lucía que se aprecia desde la oficina de la ONG Espacio Público es, de alguna forma, obra de su director, Eduardo Engel. Claro: lo que en las pasadas elecciones presidenciales y parlamentarias era a estas alturas una andanada de carteles y propaganda, hoy está vacío en buena parte debido a las medidas impulsadas por la comisión presidencial que él encabezó para proponer reformas a las campañas.

Desde Espacio Público, Engel no le ha perdido pisada al tema. La prueba es el lanzamiento de Lupa Electoral (lupaelectoral.cl), que, tal como en las municipales de 2016, busca entregar información relevante de la campaña –como las fuentes de financiamiento- en una forma didáctica.

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"El objetivo es que la ciudadanía se informe respecto de las nuevas legislaciones, cómo se están financiando los candidatos, cómo están desarrollándose las campañas, o en qué lugares está prohibido y permitido hacer propaganda electoral, porque alguien puede contribuir a que se cumpla la nueva legislación haciendo las denuncias correspondientes al Servel. Y ayudar, a través de la Lupa, a poner ciertos temas sobre el tapete analizando esos datos", dice, añadiendo que aún queda trabajo pendiente: "Queremos emparejar la cancha con los incumbentes, pero no volviendo a una situación en que había una enorme ventaja para quien tenía más dinero".

¿Cómo ve el escenario de las campañas tras los cambios a la ley electoral?

Estamos en una etapa enorme de cambios culturales sobre cómo hacer las campañas electorales. La buena noticia es que hay un cambio tecnológico que facilita esa situación, porque hoy en día las redes sociales ofrecen alternativas mucho más baratas que en el pasado para llegar a un mayor número de candidatos. Toma como ejemplo el distrito 10, que es un distrito grande en la RM, con muchas comunas, y tienes que uno por cien mil pesos puede llegar con un mensaje en Facebook hasta a 200 mil personas. Por lo tanto, ese tipo de mensaje va a llegar con alguna idea, con alguna propuesta, con algo que sea más que la foto del candidato y su sonrisa. Permite, con montos mucho más bajos que en el pasado, llegar masivamente, y eso significa replantearse cómo se hace una campaña.

Un planteamiento que han hecho incluso algunos candidatos presidenciales es que aquellos parlamentarios que vayan a la reelección no reciban su dieta. ¿Sería una forma de emparejar la cancha?

El tema con los parlamentarios es que se ha avanzado mucho, pero falta por avanzar en temas como las asignaciones. Por lo tanto, uno puede ser más proactivo de lo que ha sido hasta ahora en tener instancias con mayor poder que fiscalicen que esas asignaciones no se usen en nada que no sea la labor parlamentaria habitual. Ahora, si un parlamentario durante la campaña está también trabajando en su labor, no es del todo obvio por qué no se va a financiar eso.

En el 2013, las principales campañas presidenciales tuvieron observaciones por temas de financiamiento de la política. ¿Espera que con los cambios esta elección no tenga esos cuestionamientos?

Los incentivos han cambiado. La capacidad de denunciar los casos es mucho más fácil que hace cuatro años. Investigarlos también va a ser más fácil: hay mucha más conciencia en la ciudadanía al respecto, a la importancia de tener transparencia en el financiamiento de la política. Y quienes decidan seguir con prácticas que eran ilegales antes y ahora lo son más aún -porque el costo es mucho mayor-, realmente están arriesgando mucho más que en el pasado, por lo que yo esperaría una conducta distinta de los candidatos comparado con cuatro años atrás.

¿Usted cree que los candidatos han tomado conciencia de este cambio?

Creo que crecientemente han ido tomando conciencia. El cambio se nota, entre muchas cosas, en que antes los candidatos sabían quién los financiaba, los financistas también sabían, pero la ciudadanía no sabía. Lo supimos después, cuando se filtró todo. Y hoy las mismas personas que tienen propiedad importante en grandes empresas están financiando de cara al país sus candidatos. Hay una lista que es pública y conocida. Eso es muy importante.

Entonces, para usted, es un triunfo que se sepa, por ejemplo, que el presidente de la Bolsa de Santiago, Juan Andrés Camus, financia a Sebastián Piñera

Ese es un ejemplo. Siempre es malo tomar ejemplos concretos, pero hay un gran número de financistas que tenían roles importantes, que financiaban históricamente la política, y que hoy lo están haciendo de forma transparente. Creo que lo que pasó con el presidente de la Bolsa es sano, y es una de muchas situaciones de ese tipo.