El Dakar se corre mejor en familia

Dejar a la familia por 17 días sin la completa seguridad de regresar a casa sano y salvo debe ser una de las situaciones más complicadas para los participantes del Dakar, pero no para todos. Muchos irán con sus hijos en las cabinas. Se trata de 10 vehículos, de los cuales tres son de chilenos.

Para Jorge Latrach y su hijo Juan Pablo será su quinta intervención en el clásico del todoterreno. Los tripulantes del Toyota Tundra de AutoGasco aseguran que han aprendido mucho de su experiencia y que correr juntos "hace más llevadera la carrera", como comenta el piloto que se hiciera conocido en el ochentero Jeep Fun Race. Pero agrega: "La verdad es que estoy bien contento de correr con él, pero lo malo es que se quiere quedar con el volante, me quiere hacer a un lado".

El año pasado, los Latrach debieron abandonar en la quinta etapa, una experiencia que no quieren repetir este año: entendible, si de sus cuatro Dakar llegaron a dos metas.

Fernando y Alvaro León también son ya un clásico del Dakar sudamericano. Su primera incursión juntos fue en 2009 y desde entonces alcanzaron la llegada tres veces, aunque este año abandonaron.

"El objetivo es ir mejorando cada edición", señala Fernando León. "Con Alvaro estamos afiatados al ciento por ciento y esperemos que este sea nuestro mejor Dakar", comentó el piloto de una Toyota a medios peruanos.

En tanto, para Maximiliano Ríos, esta será apenas su segunda experiencia dakariana. Como navegantes en la Toyota anotó a sus hijos, Maximiliano y Rodrigo.

"Es un desafío hacerlo con un hijo. Eso es algo impagable, tiene un tremendo significado. Además, los dos llevamos esto en la sangre", reconoce a la prensa Ríos padre.

LOS CASOS EXTRANJEROS
Varios otros casos se dan en Sudamérica. Dos son peruanos. Fernando Ferrand y su hijo del mismo nombre fueron los mejores de su país en la edición de este año, aunque esperan mejorar ese puesto 46. "Corremos juntos desde 1995 y nos conocemos muy bien", asegura Ferrand hijo.

El otro es Luis Mendoza, quien corrió en 2010, pero ahora lo hará por primera vez con su hijo homónimo. "Voy a cumplir un sueño", destaca el padre.

Desde Argentina, en tanto, participan Ramón y Juan Pablo Sisterna, que en 2010 fueron 49º, su mejor ubicación. "Correr el Dakar con mi papá me da una confianza muy grande, creo que no lo haría con nadie más", asegura Juan Pablo, quien se perderá el nacimiento de su hijo por estar compitiendo.

También es transandino Walter D'Agostini, quien irá acompañado de su hijo Augusto y su sobrino Hernán en un camión Mercedes, la primera experiencia para ellos en los vehículos mayores.

De Europa, en tanto, se presentarán los franceses Michael y Julien Saumet, que también van en camiones; y de México, Oscar y Mauricio Uribe, en autos.