El polémico presidente de Sevilla, el nuevo club de Medel
Desde su juventud José María del Nido enfrenta conflictos relacionados con el fútbol, la política y los tribunales.<br>
Si el ambiente estaba "caliente" para el duelo por la Copa del Rey entre el Sevilla y Real Madrid fue en gran parte gracias a José María del Nido, presidente del cuadro sevillano. Es el estilo del dirigente que en la previa atacó en cada declaración a José Mourinho y a los merengues y que será el nuevo "jefe" de Gary Medel.
Abogado de 54 años, es presidente del Sevilla desde 2002. Bajo su mandato el club creció económicamente y sumó varios éxitos deportivos: dos Copa UEFA, una Supercopa de Europa, dos Copa del Rey y una Supercopa de España.
En septiembre de 2009, la revista Don Balón lo ubicó en el lugar 21 de las personas mas influyentes en el futbol español y a fines del año pasado lideró la "Guerra de las Televisiones", en la que exigía que se disminuyera el porcentaje que reciben Barcelona y Real Madrid por los ingresos por las transmisiones de los partidos.
Y ahora se enfrentó nuevamente a los madridistas. Antes del compromiso dijo que pondria seguridad especial al camarín de los árbitros para que no llegará nadie del Real Madrid a presionar. Además, defendió el video promocional del partido, en el que se ponía en portugués, en clara alusión a Mourinho y Cristiano Ronaldo, que "te vamos a dejar sin un título". Tras la molestia que generó en los merengies, Del Nido dijo que le subiría el sueldo a quien hizo el video.
En España cuestionan la prepotencia con la que se pasa repitiendo que el Sevilla es el mejor equipo del mundo.
Pero sus polémicas no sólo tienen relación con el fútbol. Políticamente se ubica en la extrema derecha y en su adolescencia fue jefe de las juventudes de Fuerza Nueva en Sevilla. En noviembre de 1978 fue detenido por su presunta participación en una agresión a un miembro del Comité del Partido de Los Trabajadores de España de nombre Jesús Damas Hurtado, que tuvo que ser hospitalizado.
Fue abogado de los ex alcaldes de Marbella, Jesús Gil y Julián Muñoz y en 2002 la Fiscalía Anticorrupción lo comenzó a investigar por beneificios obtenidos ilegalmente por el Ayuntamiento de Marbella con contratos que suman casi 7 millones de euros. Desde 2004 y 2006 se encuentra imputado por delitos de prevaricación, fraude y malversación de caudales públicos.
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