Especialista da recomendaciones sobre contacto con mineros atrapados

Psiquiatra Rodrigo Figueroa cree que muchos de los afectados por la tragedia de la mina San José, no desarrollarán secuelas sicológicas de largo plazo.




Ante la tragedia vivida estas últimas dos semanas por trabajadores de la mina San José en Atacama, el doctor Rodrigo Figueroa, psiquiatra Jefe de la Unidad de Trauma, Estrés y Desastres del Departamento de Psiquiatría de la Universidad Católica, opina sobre el futuro escenario al momento de entrar en contacto bajo tierra.

De acuerdo al especialista, los seres humanos están biológicamente preparados para adaptarse a la adversidad y la mayoría de las personas que viven experiencias dolorosas o dramáticas logran sobreponerse e incluso crecer.

Lo importante en este caso, según Figueroa, es que las autoridades sigan actuando del mismo modo como lo han hecho hasta ahora, entregando la información primero a los familiares, en forma privada, sin acceso a la prensa, en forma objetiva, sensible y respetuosa, para luego informar con el mismo respeto y objetividad a través de la prensa. También canalizando los requerimientos de los familiares para apoyarlos en sus necesidades concretas.

El psiquiatra enfatiza en que los seres humanos están preparados para adaptarse incluso a las peores circunstancias, por lo que, según el especialista, probablemente muchos de los afectados por esta tragedia no van a desarrollar secuelas sicológicas de largo plazo.

En tanto, Figueroa hace hincapié en que frente a cualquier desenlace es importante que se mantengan los mismos principios con los que se ha estado trabajando hasta ahora, que están avalados por la literatura científica y que permiten promover la resiliencia individual y colectiva:

1) Promover sensación de seguridad, confort y disponibilidad de recursos básicos (agua, abrigo, alimentos).

2) Favorecer la calma a través de rutinas comunicacionales objetivas y coherentes que disminuyen la incertidumbre.

3) Favorecer la auto-eficacia de los individuos y agrupaciones.

4) Facilitar el contacto y comunicación entre los seres queridos.

5) Mantener una realista noción de esperanza si corresponde.

Figueroa explica que para esta tarea se requieren encargados, tareas, organización, coordinación, disciplina y claridad respecto a lo que se va a hacer y especialmente lo que no se va a hacer. Mientras que su impresión es que la respuesta psicosocial en esta oportunidad ha sido muy adecuada.

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