Francisco "Chaleco" López: "Me van a ver arriba de la moto nuevamente"

En dos meses, Francisco López subió tres kilos. Se siente fuera de forma, pero con tiempo para recuperarse con miras al debut en el Rally Mobil, en abril. El Dakar aún aparece en su horizonte, aunque lejano y sobre cuatro ruedas, pese a que no descarta un regreso en motos. El mismo vehículo que volverá a montar el próximo año para un "evento sorpresa".

¿Se dedicará únicamente al Rally Mobil en 2015?

A principio de año estuve a punto de subirme al Rally Mobil, pero mis auspiciadores me dijeron que preferían que hiciera bien las motos. Siempre tuve la intención, pero lo pensaba como algo secundario. Este proyecto es una transición a los autos, para aprender. Todo ser humano, y sobre todo un deportista, necesita un desafío nuevo, porque cuando ya estás en uno que controlas, se hace muy cotidiano.

¿Ya conoce el auto?

Esta semana quiero verlo. No sé cuánto corre, cuánto frena, cómo anda... Quiero prestarle atención también a leer la hoja de ruta y que otra persona me la cante. Y con otro lenguaje. Más que un navegante que me entregue rapidez, buscaré uno que me dé las bases.

¿Es una transición para volver al Dakar en autos?

Al día de hoy no tengo nada. Primero, la parte deportiva es importante, un vehículo de cuatro ruedas es diferente y necesito entenderlo. Lo he hecho una sola vez, hace como cuatro años en un "auto cero" y me sentí bien, cómodo, pero ahora viene la competencia y quiero hacer esto relativamente bien y después recién pensar algún día en el Dakar. Y una segunda cosa es el presupuesto; el del Rally Mobil debe ser un 20 por ciento del que se necesita para un Dakar. Y el de autos es cuatro veces mayor al de motos... y no para ir a ganarlo, sino para hacerlo bien nomás.

¿Está pensando en dos años más entonces?

Sí. A mí me gustaría un par de años o 12 meses de experiencia y después recién pensar en un Dakar.

O sea, para 2017...

Si es que... Me encantaría, creo que mi experiencia es más de fuera de pista que de Rally Mobil. Tengo muchos kilómetros en el desierto.

¿No sería mejor participar en cross country en autos?

Sin duda, pero creo que debo partir con el Rally Mobil: es competitivo, lo más fácil para comenzar a subirse y es cercano a mis auspiciadores Copec, Mobil y Movistar.

¿Qué otras cosas hará en 2015? ¿Algo en motos?

Tengo una sorpresa o más que eso, una travesía muy buena en moto, un proyecto importante. Eso se definirá en un par de meses más. Tengo un proyecto en moto, no la he descartado ciento por ciento.

¿Y qué es? ¿Un campeonato, una carrera, un raid?

Es algo muy desafiante, pero falta finiquitarlo con los auspiciadores.

¿Es personal o es una competencia?

Personal.

¿Y en qué moto?

En KTM. Ya, eso no más, es sorpresa. Pero me van a ver arriba de la moto nuevamente. Y no es una despedida en La Moneda o qué se yo. Es bueno.

¿KTM intentó convencerlo de que no se alejara?

No. Sabían que yo no me sentía bien, que no me sentía capaz de hacer un buen Dakar, que la pierna me molestaba.

¿Qué influyó más, la rodilla o la cabeza?

Ambas. Mi umbral de dolor es muy alto. En el día no me dolía nada, pero en la noche sentía la pierna caliente, cojeaba en el hotel y en la mañana tomaba desinflamatorios y analgésicos.

¿En carrera?

En época de entrenamientos.

¿Volvería al Dakar en moto?

Eso dependerá de la motivación. Al día de hoy, es muy pronto para pensar.

¿Ha pensado volver más atrás, al enduro, por ejemplo, como aficionado, por último?

Tengo motos de calle, otras antiguas, otras de enduro, nunca las dejaré, pero competir en enduro, no creo, ya bajamos bastante lo competitivo.

¿La caída en Salta este año fue determinante para dejar el Dakar?

Todo se junta. En el año había decidido ir al Dakar 2015, pero cuando me vi con la lesión dije "ya tengo muchos avisos", la rodilla no me está aguantando, no tengo fuerzas, es cuando tomas la decisión de bajarte de las motos.

Cuando se retiró Carlo de Gavardo reconoció que le había tomado miedo a las motos. ¿Usted?

Es que en este depote arriesgas mucho y vas al límite. Si vas sin pensar, perfecto, pero si piensas que vas al límite y te puede pasar algo, ya no hay nada más que hacer.