Gobierno colombiano y Farc acuerdan retomar negociaciones de paz tras liberación de general

El secuestro de Alzate sumió al proceso de paz en una crisis luego que el presidente de Colombia congelara las negociaciones con la guerrilla en respuesta a la retención del militar.




El gobierno colombiano y las Farc acordaron hoy la pronta liberación del militar secuestrado el domingo por la guerrilla, para poner fin a la crisis que causó la suspensión temporal de los diálogos de paz esta semana.

El general Rubén Alzate y otros cuatro prisioneros serán liberados "a la brevedad posible", anunciaron en La Habana representantes de los países garantes del diálogo de paz, Cuba y Noruega, tras varios días de tensiones.

El gobierno de Juan Manuel Santos anunció por su parte en Bogotá que retomará las negociaciones de paz apenas se concrete la liberación. Se estima que la entrega podría ser esta semana.

Junto con Alzate, el militar de más alto rango capturado jamás por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), serán liberados la abogada y el otro militar que lo acompañaban cuando cayó en manos de la guerrilla, así como otros dos soldados.

"Las partes han acordado las condiciones necesarias para la liberación", señaló un comunicado leído en La Habana por el funcionario cubano Rodolfo Benítez y la diplomática noruega Rita Sandberg.

"Las liberaciones se llevarán a cabo a la mayor brevedad posible", explicaron.

El secuestro de Alzate, justificado por las Farc porque lo veían como "personal de guerra enemigo" moviéndose en "área de operaciones de guerra", sumió al proceso de paz en una crisis. 

El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, congeló de inmediato las negociaciones al anunciar la captura de Alzate el domingo y condicionaba hasta ahora la reanudación del diálogo a la liberación del general.

Alzate y sus dos acompañantes, la abogada Gloria Urrego y el cabo Jorge Rodríguez, fueron secuestrados el pasado domingo cuando se movilizaban en una zona selvática del departamento noroccidental del Chocó vestidos de civiles. Santos criticó luego posibles fallos en los protocolos de seguridad.

Los soldados Jonathan Díaz y César Rivera, que también serán liberados junto con Alzate, cayeron por su parte hace 10 días en manos de la guerrilla tras un combate con el Ejército librado en el departamento de Arauca, en el noreste del país.

Poco después del anuncio del acuerdo para la liberación de los cinco prisioneros, la Presidencia de Colombia comunicó su disposición a volver a la mesa de diálogos, justamente cuando se cumplían exactamente dos años del inicio de las conversaciones en Cuba. 

"Una vez todos (los prisioneros) se encuentren en libertad, la delegación del gobierno regresará a La Habana", señaló Bogotá en un breve comunicado de tres puntos.

La presidencia agradeció también a Cuba y Noruega por "su compromiso y colaboración para facilitar la liberación" de los secuestrados.

Asimismo, el gobierno aseguró que brindará "toda su colaboración para garantizar el retorno seguro y a la mayor brevedad" del general Alzate, la abogada Urrego y los otros tres militares. Según el comunicado, en la liberación de los prisioneros participarán el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), así como los países garantes del proceso de paz que se lleva a cabo desde hace dos años en La Habana.

La Cruz Roja ya ha participado en varias ocasiones como intermediaria para la entrega de rehenes de las Farc, así como en las operaciones de traslado de los guerrilleros que participan desde hace dos años en el proceso de paz colombiano. 

En las últimas horas habían aumentado en Colombia las expectativas de que Alzate fuera puesto pronto en libertad. En el país sudamericano se baraja un plazo de pocos días para la entrega de los prisioneros.

La delegación de paz del gobierno debe viajar previsiblemente en los próximos días a La Habana para retomar los diálogos. Las conversaciones que debían reanudarse esta semana están actualmente centradas en la situación de las víctimas, el cuarto de cinco puntos pactados en la agenda de paz.

Para la próxima semana estaba inicialmente prevista la llegada de una delegación de 12 personas que deben dar en La Habana testimonio de sus vivencias durante la guerra. El grupo es el quinto y último de un total de 60 personas que debían comparecer ante la mesa de diálogos en Cuba.

Las FARC y el gobierno colombianos han alcanzado hasta ahora tres acuerdos parciales en el proceso de paz abierto en octubre de 2012 y trasladado un mes después de forma permanente a La Habana.

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