Hospital de Puente Alto: construcción no se iniciará en el actual gobierno

Las polémicas en torno al Hospital de Puente Alto no parecen acabar. El recinto, que en 2014 abrió los primeros fuegos entre la actual administración y la pasada, ha sorteado fallidas primeras piedras, falta de estudios, carencia de presupuesto y confusas fechas de ejecución. Ahora, bajo el compromiso de quedar en obras a marzo de 2018, nuevos problemas confirman un cambio en su destino: el recinto no se comenzará a construir durante el actual gobierno y quedaría en alguna etapa del proceso de licitación.

Así lo informó el Ministerio de Obras Públicas (MOP), tras detallar que el cronograma del recinto estipula que los trabajos se liciten el próximo año, según lo coordinado con el Ministerio de Salud (Minsal). "El Minsal tiene programado que en 2018 se firmará el convenio mandato con la Dirección de Arquitectura, que permitirá el inicio del proceso licitatorio del proyecto", afirmó el MOP.

Así, considerando esta modalidad de desarrollo, al término del actual gobierno la iniciativa podría encontrarse en trámites de adjudicación. Sin embargo, impediría la ejecución de obras concretas antes de, al menos, el segundo semestre de 2018, cuando haya asumido la nueva administración.

Al respecto, el Minsal planteó que las fechas corresponden a la planificación actual -donde Salud se hace cargo del diseño del hospital y el MOP de su construcción-, pero que se están buscando alternativas para agilizar los trámites.

El proyecto de Hospital de Puente Alto considera nueve pisos y 400 camas, en beneficio de una población de

1,5 millón de personas. La altura, sin embargo, supera el límite de cuatro pisos que establece el plano regulador comunal. Y ese ha sido uno de los principales escollos.

Para subsanarlo, el Servicio de Salud Metropolitano Sur Oriente (Ssmso) pidió en 2013 al alcalde de la comuna, Germán Codina, aumentar la altura máxima del seccional. Eso llevó al edil a la Seremi de Vivienda y Urbanismo a tramitar un cambio de la norma mediante la aplicación de un mecanismo de reconversión urbana establecido en la Ley General de Urbanismo y Construcciones.

Las gestiones tardaron dos años y recién en noviembre de 2016 se ingresó a la Contraloría la modificación para su toma de razón. Sin embargo, el organismo hizo observaciones que dilataron más el proceso, las que, según indicaron desde Vivienda y Urbanismo, "a la fecha fueron subsanadas y reingresadas a dicho órgano contralor".

De acuerdo al Minsal, "el retraso en la regularización del terreno ha afectado el cronograma del diseño, pero estamos confiados en que la Contraloría General de la República lo resuelva rápidamente".

Ahora, en los diez meses que quedan para terminar el gobierno, Salud debe esperar la resolución de Contraloría y concluir el anteproyecto de diseño para llevarlo a estudio preinversional.

Ante ese escenario, Salud estudia si mantener el plan inicial o licitar el diseño y las obras de forma conjunta, lo que permitiría acelerar los plazos, pero tardaría al menos cinco meses.

"Estamos evaluando alternativas para que este hospital se licite lo antes posible, sin descartar usar el modelo de diseño y construcción en una misma licitación", indicaron en Minsal.

Para el alcalde Codina la situación es preocupante: "El gran problema que tiene hoy el hospital tiene que ver con la inoperancia que ha tenido el Minsal. Pasan los años y no se concreta una obra que es fundamental".

En la misma línea, el diputado por la zona Leopoldo Pérez (RN) puso en duda incluso que la construcción comience en 2018. "Están bastante atrasados. Aquí hay negligencia y falta de previsión de tiempos. Estamos en las postrimerías y ni siquiera hay licitación", dijo.

Sin embargo, para el senador Carlos Montes (PS) "culpables hay hartos. Está el municipio, Salud, Vivienda, y todos los que tienen la responsabilidad de estudiar la prefactibilidad de un proyecto".

En diciembre pasado, la iniciativa cumplió tres años desde la instalación de la primera piedra, en una ceremonia que encabezó el ex presidente Sebastián Piñera. En la ocasión, y solo días más tarde, enfrentó la primera polémica cuando Codina denunció el retiro de la maquinaria y los trabajadores del terreno.

A poco de asumir, el actual gobierno denunció que el hito correspondía solo a un Centro de Referencia en Salud, porque la segunda etapa -que consistía en la edificación del hospital-, no estaba estudiada, proyectada ni financiada. Por ello, la obra se anexó al plan de inversiones. "Nuestro compromiso es que el hospital quede adjudicado, ojalá en el mayor avance que podamos conseguir", dijo la subsecretaria de Redes Asistenciales, Gisela Alarcón.