La primera plana que protagoniza Jaime Valdés

"¡Pajarito y diez más!". Jaime Valdés detiene su andar y busca al autor de la frase. No lo encuentra, pero agradece. De la nada, entre  los rodillos de una de las imprentas de La Tercera, aparece el culpable. Es un operador de la máquina, con las manos y el rostro manchados de tinta. "Con Pajarito y diez más, Colo Colo lo gana todo. A usted lo admiro", completa el fanático del mediocampista, mientras se arregla para una foto con él.

El volante lleva consigo un cuadro de bordes rojos, con su imagen enmarcada levantando el puño como sinónimo de victoria. A un costado de su figura está escrito con letras blancas: "Encuesta La Tercera, mejor jugador Apertura 2014: Jaime Valdés". Es el dueño de un cetro votado por sus propios compañeros de profesión y los entrenadores de Primera División. Ayer, en la redacción de este diario, recibió el reconocimiento. Sin pompa, sin luces de neón, como se siente más cómodo, según propia confesión.

Su condición es no tocar temas de Colo Colo. Debe respetar el acuerdo de su plantel de no hablar con la prensa. Acepta, eso sí, dar sus impresiones por el galardón: "Me siento orgulloso. Es un premio importante, porque me eligieron jugadores y entrenadores. No sé si fui el mejor. Y si lo fui, es por mi compromiso, lo di todo. Me pone feliz que los colegas me hayan dado el premio. Es un premio al esfuerzo, porque quería rendir en Colo Colo, porque es el equipo del que soy hincha desde chico".

Primero posa para las fotos de protocolo. Después, para las espontáneas, que salen por decenas. El rito seguirá después por todos los rincones que visita de Copesa. Por la redacción, las prensas, la salas de despacho, hasta en el estacionamiento surgen fanáticos. 

Es su primera vez en el corazón de un medio escrito. Incluso se sienta en la silla del editor de deportes, para conocer el proceso de publicación de una noticia. "¿Aquí escriben todas las mentiras?", se mofa el futbolista que llegó a Colo Colo en enero de este año después de un largo período en el fútbol europeo. "Sabía que no sería fácil volver a Chile después de estar años en Europa jugando en lo más alto. Al inicio no venía bien, pero me fui motivando y con trabajo duro y en silencio pude aportar para ganar el Clausura", expresa.

El 20 albo repite una y otra vez que lo que más le gusta de este homenaje es que se lo dieron los mismos futbolistas. Aquellos que enfrentó durante todo 2014. "Hubo muy buenos momentos durante el año, pero el mejor de todos fue cuando ganamos la estrella 30", recalca.  Se entiende su elección, con esa vuelta olímpica en el Monumental (en abril), Valdés cumplió un sueño de niño. La promesa que le hizo a su familia y a todos sus amigos de la población Los Cóndores, donde creció.

A propósito de su barrio de origen, Pajarito comenta que aún le queda otro deseo que cumplir: "Soy hincha de Colo Colo, pero quiero retirarme en Palestino. Siempre lo he dicho". Será su homenaje al club donde se formó.

La visita termina y un fanático le pide que no se vaya de Colo Colo, asustado por las informaciones que lo ligan al fútbol de Estados Unidos. El mejor del Clausura calla, pero asiente con la cabeza. Es quizás su forma de decirle que no se preocupe, que seguirá en el Monumental.

Es hora de partir, pero antes de irse, Valdés se compromete: "Estaré aquí el próximo año para entregarle el premio a quien lo gane. Quizás me lo dé a mí mismo", bromea. A ver qué dicen sus colegas al final de próximo torneo.