La reina de belleza que guió el ascenso de Puerto Montt a la Primera B

"Yo fui reina de la ciudad. Coincidió con el año en que el club estuvo en Primera División por primera vez (en 1997)". La dueña de este recuerdo veraniego es la presidenta de Deportes Puerto Montt, Jessica Uribe, quien condujo desde la máxima testera del club el ascenso de los "delfines" a la Primera B. Ello, tras coronarse campeones de la Segunda División Profesional el martes recién pasado. Un éxito que todavía se festeja en la capital de la Región de Los Lagos.

"La verdad es que cuesta asmiliarlo. Desde que asumimos nos propusimos el ascenso. Nos mentalizamos harto en eso y tratamos de ser racionales. Y fuimos tan racionales que bloqueamos lo emocional. Ahora nos damos cuenta de que se cumplió lo del ascenso, que es un sueño", relata a La Tercera la portadora del timonel desde junio de 2014.

Durante la vida cotidiana, Jessica Uribe divide su tiempo en dos: la presidencia del club albiverde y su profesión de asistente social, la que ejerce en un órgano estatal. Y esta dualidad la aplica en el fútbol: "Trato de compatibilizar la parte social y el tema institucional del club. Yo tengo el tema social internalizado, y trato de que el plantel y las personas que acompañan al plantel tengan las mejores condiciones posibles. El trabajo social marca un sello", explica.

Eso sí, admite que llevar adelante esta impronta en el club "fue complicado al comienzo, y muchas veces los otros directores me decían 'esto es fútbol' y que no había tanto de lo 'social'. Pero con el tiempo fueron entendiendo, yo también fui cediendo, y ahora nos hemos complementado bien". Tanto que el equipo ahora está de vuelta en la Primera B.

"En este momento disfrutamos el hecho de ascender. El lunes (ayer) tenemos una reunión para ver temas administrativos, y de ahí vamos a analizar lo que viene en adelante. Y dentro de ello, por supuesto, la conformación del plantel", se regocija.

UNA ¿COINCIDENCIA?

Jessica Uribe reconoce que todavía "culturalmente, Chile es un país machista. El fútbol es un deporte supuestamente de hombres, por lo que llama la atención que haya una mujer presidenta del club". Sin embargo, destaca que "nuestros socios y los hinchas no son tan machistas porque confiaron en este proyecto al mando de una mujer".

"El tema de género ha ganado espacio. No es menor tener una presidenta. Eso significa que estamos en igualdad de condiciones. Y en ese sentido, yo me tomé esto como un desafío, y me he sentido avalada por los hinchas y por el directorio", diagnostica.

Pero hay un hecho bastante llamativo: los dos últimos campeones de la Segunda División profesional tuvieron una presidenta. El monarca anterior de la serie, Iberia, lo hizo con Ana Bull como máxima directiva. "Eso puede tener varias lecturas. Cábala, un ojo clínico para elegir planteles... En nuestro caso, yo rescato y resalto que no es sólo un tema mío. Nosotros confiamos en un directorio especialista en varias áreas, con un enfoque multidisciplinario", reflexiona. Palabra de mujer.