Ministra de Cultura: "Este año vamos a someter los Fondos de Cultura a una reingeniería total"

Los resultados de los Fondos de Cultura arrojaron varias novedades este año. Para empezar, fue la entrega que más recursos destinó a proyectos de regiones, diferentes a la Metropolitana. En Santiago sólo se repartió el 48% de los casi 19 mil millones asignados. El monto total distribuido significó, además, un crecimiento del 12,7% con respecto al 2014. Hubo otras modificaciones, como el fin del cofinanciamiento, que obligaba a garantizar la cobertura de una parte del presupuesto de cada proyecto. Así, aumentó el acceso a los fondos en un 29% y llegaron 11.610 postulaciones. A su vez, en el Fondo del Libro por primera vez se seleccionaron los proyectos bajo la modalidad de evaluación anónima, lo que igualó las condiciones para los postulantes.

A pesar de estos cambios, que impulsaron la descentralización y la  transparencia en la entrega de los fondos que se dieron a conocer hace poco más de una semana en el Museo de Arte Precolombino, la comunidad artística se quejó por lo que consideran una gestión cortoplacista y un sistema viciado.

La ministra de Cultura Claudia Barattini responde los cuestionamientos y reconoce que es necesario cambiar el sistema. "Con esta entrega de Fondart queda demostrado que es necesario diversificar los instrumentos de asignación de recursos, porque aún se genera una frustración muy grande con los proyectos buenos que quedan fuera. Este año vamos  a someter los Fondos de Cultura a una reingeniería total. Hay que 'desfondarizar' la cultura, porque este no puede ser el único instrumento para asignar recursos, y en eso estamos trabajando", explica.

Las reformas mencionadas son parte del proceso, que este año planea modificar por completo el sistema. La idea central será acotar el alcance de los Fondos de Cultura, para crear nuevos programas con otros sistema de asignaciones. "Requerimos de nuevas políticas y que no todas sean concursables. En los próximos días daremos a conocer una serie de nuevos fondos que están destinados a fortalecer otras áreas de la cadena creativa", adelanta Barattini.

¿Cuáles son los cambios más importantes que sufrirán los Fondos de Cultura?

Los fondos concursables se acotarán a financiar proyectos de creación, y habrán nuevos programas, como por ejemplo el de Intermediación, orientado a la distribución de los servicios, donde tenemos una gran debilidad. El cine no alcanza a tener pantalla, las obras de teatro no llegan a salas, los libros no circulan en las librerías. Es el elemento más precario y queremos dedicar un fondo especial, pero que no sea concursable. La idea es apoyar a grandes ventanas de difusión como festivales o redes de distribución.  Lo mismo con el programa de Economía creativa, que buscar fortalecer la formación, la profesionalización y el emprendimiento cultural.

¿Qué sucederá con las instituciones que reciben aportes directos del CNCA como el GAM o el Centro Cultural La Moneda?

Aumentaremos el número de instituciones colaborativas y sumaremos recursos desde las intendencias regionales. El Parque Cultural de Valparaíso es el único organismo regional que recibe aportes. Eso tiene que cambiar.

Esta semana circuló una carta abierta por Facebook, donde artistas como Alfredo Castro, Pablo Schwarz y organizaciones como la red de Salas de Teatro manifestaron su "descontento y desconcierto" ante el fondo de $ 150 millones que recibirá CorpArtes, repartido en tres años, para hacer recorridos educativos y talleres en el Centro de las Artes 660. La molestia nace porque el proyecto es generado por "uno de los conglomerados más millonarios del país", dice la carta. "¿No sería más sensato financiar proyectos culturales que tienen serias dificultades para solventar sus existencias..?", agrega.

¿Qué opina sobre las críticas al fondo ganado por CorpArtes?

Hay que decir que aquí no hay gato encerrado. CorpArtes ganó un Fondart abierto, y cumplió con todos los requisitos legales de los evaluadores externos. Sin embargo, yo empatizo con la inquietud que moviliza la carta, y pienso que aunque el proyecto ganador es virtuoso, porque fomenta la educación artística, las corporaciones privadas como CorpArtes, vinculadas agrandes grupos económicos, debieran someterse a otros instrumentos más idóneos, como la Ley de Donaciones Culturales, que también son recursos del Estado. Los Fondos de Cultura debieran orientarse a los actores con más dificultades económicas, independiente de que para nosotros es esencial seguir facilitando la alianza público-privada.

¿En qué estado está la Consulta Indígena y el proyecto de Ministerio?  

La reforma de los fondos va en pos de esa, nuestra gran tarea. La consulta está en la recta final. Un proceso riquísimo e inédito, nunca se había pedido opinión a nuestros pueblos. En marzo mandaremos el proyecto definitivo al Congreso, que espero se tramite rápido, ya que  llega muy discutido por todos los actores.