El Mundial feliz de Henrik von Appen

Henrik von Appen no podía más de felicidad ayer en St. Moritz, Suiza. El chileno tuvo un gran descenso en la prueba combinada, un logro que puede parecer menor, pero que en el esquí nacional, casi como un contrasentido de la eterna cordillera, son escasas las alegrías.

Von Appen terminó 22º en esa prueba y apareció luego 18º en la tabla oficial, pues se borran aquellos tiempos de los competidores que no completan las dos rondas. Mejoró así el 20º lugar de Noelle Barahona en la misma instancia del Mundial 2015. La mejor ubicación de un chileno en este certamen es de la misma esquiadora, 20ª en la combinada de 2015.

Para el propio esquiador, 22 o 18 es casi lo mismo: "Es haber puesto el nombre de Chile entre los mejores, es haberle ganado a varios competidores de países importantes, recibí el respeto de mis pares, y soy de los más jóvenes de los top 20".

Claro, es uno de los más destacados rendimientos de un chileno en un Mundial de Esquí, aunque no es una prueba en sí, pues en la combinada completa terminó 31º, misma ubicación que consiguió el domingo en la prueba de descenso, el mejor DH de la historia para Chile.

El propio deportista la valora, pues compitió aún algo lesionado por la caída sufrida en Santa Catarina en diciembre, en un video que dio la vuelta al mundo.

Al respecto señala: "Esa caída fue bastante impactante de ver, pero no fue tan terrible. Pero una vez que uno llega a las mallas, queda en la mente después lo que puede llegar a pasar. Es parte del juego y tarde o temprano va a ocurrir. Fue comentado en el mundo del esquí, pero todos hemos ido alguna vez a las mallas y otros se han hecho daño".

"Hijo y sobrino de veleristas (Dag y Per von Appen) y terminé en la nieve", dice el esquiador desde St. Moritz. Aún no sabe si participará del Gigante, el viernes, "probablemente no", dice, pero lo que es muy seguro es que se irá feliz de Suiza.

"Si me decían hace tres semanas, después de lo mal que estaba esquiando, que iba a salir 29º en el Supergigante, 22º en el downhill y 31º en el combinado alpino no les hubiese creído, estoy más que satisfecho. Un buen resultado da confianza y la confianza da buenos resultados, todo se va dando. Uno es más agresivo, toma más riesgos y los tiempos van bajando", dice.

Von Appen hizo luego el eslalon lesionado de la espalda, tras un mal movimiento después del descenso, un dolor que espera superar para enfrentar lo que falta, las copas del mundo de Noruega, con que se cierra la temporada

En la misma prueba, Seven von Appen fue 44º y Kai Horwitz no finalizó, misma suerte de Noelle Barahona en el eslalon gigante.