Nueva Mayoría intensifica críticas contra el gobierno por compra de colegios

Parlamentarios DC y PS acusan que el diseño de La Moneda está "descuidando" el fortalecimiento de la educación pública. Cuestionan énfasis en adquisición de establecimientos, mientras otros sectores del oficialismo rechazan los reparos.




Un fuerte cuestionamiento a la reforma educacional del gobierno plantearon ayer algunos parlamentarios de la Nueva Mayoría.

El foco de las críticas estuvo en lo que calificaron como una "ausencia" de medidas para mejorar la situación de la educación pública, en contraste con los recursos que contempla el Ejecutivo para comprar colegios particulares subvencionados que no deseen transformarse en corporaciones sin fines de lucro.

"Los mecanismos para hacer las transiciones son discutibles. A mí todavía no me convencen. Creo que hay que revisarlos, no sólo por el gasto, sino porque el eje hay que ponerlo en la educación pública", dijo el senador Carlos Montes (PS). En la misma línea se pronunció el senador Andrés Zaldívar (DC), quien pidió "poner el énfasis" en la educación pública, aspecto que calificó como "pendiente" en la propuesta del Ejecutivo. "Si es absolutamente necesario, hay que ver si acaso hay que comprar alguna infraestructura, pero no poner ninguna prioridad en ese gasto", sostuvo, mientras que su par PPD Guido Girardi señaló que se podría buscar "otra fórmula".

Las posturas se suman a las críticas que lanzó el presidente de la DC, Ignacio Walker, visión que fue reforzada por varios al interior de la falange e, incluso, por el timonel del PC, Guillermo Teillier, y por el ex ministro Sergio Bitar (PPD).

Estas visiones se exteriorizaron luego de que se conociera un informe financiero de la Dipres, que fija en US$ 5 mil millones el monto máximo a desembolsar en este ítem, considerando que la reforma tributaria del gobierno -que se utilizará para costear el nuevo modelo educacional- recaudará US$ 8.200 millones cada año.

Walker, de hecho, insistió ayer en su postura. "Es tan importante en la formulación de una política pública escuchar a los expertos, como hacerse cargo del sentido común ciudadano. Estoy seguro de que este sentido común establece que la prioridad absoluta es la educación pública, que es la que está quedando rezagada, y que esta idea de que el Estado compre infraestructura no creo que sea una medida que pase el sentido común ciudadano. La gente entiende que los recursos deben tener otras prioridades", afirmó.

Otros sectores del oficialismo, sin embargo, rechazan los reparos y explican que la cifra informada por la Dipres corresponde a una proyección para un total de 12 años. En ese sentido, agregan que a esas alturas la reforma tributaria del gobierno recaudará cerca de US$ 100 mil millones anuales.

El presidente de la Comisión de Educación del Senado, Fulvio Rossi (PS), dijo que "lo de la compra de colegios no se ha entendido suficientemente bien, porque nunca se ha planteado como el objetivo central, sino que como una alternativa en caso de que un sostenedor no quiera seguir en el rubro educativo".

En el gobierno estiman que los colegios que podrían tener que adquirir corresponden a 1/3 del total, por lo que el monto sería bastante menor a los US$ 5 mil millones que fija la Dipres.

El tema fue abordado en la reunión de trabajo que realizaron el lunes pasado los diputados de la DC con los ministros de Educación, Nicolás Eyzaguirre, y de Interior, Rodrigo Peñailillo.

Una de las propuestas que se barajan en la Nueva Mayoría es que los aportes basales se incorporen desde ya, en paralelo a una gradualidad en el fin al lucro y a la selección. Esto, mientras se fortalece la educación pública. "Creo que va a haber una transición en la que va a seguir habiendo colegios con lucro, pero tiene que ser totalmente transparente: que se sepa cuánta plata están sacando", comentó Montes.

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