ONU lanza operación humanitaria en Sudán del Sur en medio de violencia sectaria

Los enfrentamientos inter-étnicos en las últimas semanas han dejado más de 3.000 muertos, según las autoridades locales. La ayuda ya comenzó a llegar al el estado de Jonglei.<br>




Naciones Unidas lanzó una vasta operación humanitaria de emergencia en Sudán del Sur, país azotado por la violencia inter-étnica en las últimas semanas que ha dejado más de 3.000 muertos.

La ayuda se centra en el estado de Jonglei y particularmente en la localidad de Pibor, donde se han sucedido enfrentamientos como el de la semana pasada, en que 6.000 jóvenes armados de la tribu Lu Nuer fueron a Pibor y se enfrentaron con los de la etnia Murle,  acusados de robos de ganado.

La ONU estima en 50 mil el número de personas afectadas y sostiene que las necesidades son importantes, según precisó en Ginebra la vocera de la oficina de la organización para la  coordinación de asuntos humanitarios (OCHA), Elysabeth Byrs.   

Por otro lado, el Programa Alimentario Mundial (PAM), Unicef,  ACNUR, la OIM y OCHA, al igual que otras agencias humanitarias  de Naciones Unidas llevarán agua, alimentos y otras ayudas a las  víctimas.   

"Ya hay alimentos sobre el terreno, y ahora deberían estar distribuyéndose", aseguró la viceministra de Asuntos Humanitarios y Gestión de Desastres, Sabina Sario Nyangamoi Lokolong, según informó hoy el diario sursudanés "The Citizen". Los víveres fueron trasladados en helicópteros de la Misión de la ONU, debido al mal estado de las carreteras y caminos de Jonglei y de Pibor en particular.

Lokolong explicó que van a dar prioridad a los huérfanos a la hora de distribuir los víveres y añadió que se han instalado hospitales de campaña bien equipados con medicamentos para compensar la pérdida de material médico durante los choques. Ella estacó el papel que están desempeñando las agencias de la ONU como la Misión de la ONU en Sudán del Sur y la del Programa Mundial de Alimentos.

Las organizaciones humanitarias estiman que podrá alimentar a unas 7.000 personas en los próximos días, aunque advierte que, dada la situación de inseguridad alimentaria se calcula que en 2012 debería dar comida a unos 2,7 millones de personas, según la ONU.

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