Parlamento de Cataluña pide poder convocar consulta soberanista
De realizarse el referéndum se preguntaría a la ciudadanía si está de acuerdo con que Cataluña sea un Estado independiente.
El Parlamento de Cataluña pidió hoy autorización para convocar en la región del noreste de España la consulta soberanista que el jefe del Ejecutivo catalán, Artur Mas, pretende celebrar allí el 9 de noviembre de este año.
La cámara regional, en Barcelona, aprobó la propuesta de pedir al Congreso de los Diputados español que delegue en ella las competencias para hacerlo.
Fue con 87 votos a favor, el 64 por ciento de los diputados. A Convergencia y Unión (CiU), el partido gobernante en Cataluña, se unieron los independentistas de ERC, los ecosocialistas de ICV y tres diputados socialistas díscolos. En contra votaron 43: los socialistas, el PP de Mariano Rajoy y los antinacionalistas de Ciutadans.
El de hoy es un nuevo paso en el pulso soberanista echado al gobierno español de Rajoy, que en reiteradas ocasiones ha asegurado que no permitirá que se celebre el referéndum porque es inconstitucional.
El Congreso de los Diputados, al que se llevará ahora el texto aprobado, no cederá las competencias a la cámara catalana, pero esa negativa, según analistas, será rentabilizada por CiU y por el presidente del gobierno regional catalán, Artur Mas, para convencer a muchos de los indecisos de que con el Estado español no se puede pactar nada.
Mas fijó la fecha de la consulta el pasado 12 de diciembre, tras un acuerdo con los demás partidos catalanes favorables a ella. Las preguntas que pretende plantear a los ciudadanos en el referéndum son: "¿Quiere usted que Cataluña sea un Estado?" y, en caso afirmativo, "¿quiere que sea independiente?".
Cataluña, con 7,6 millones de habitantes, es la región más fuerte económicamente de España, aunque también es la que acumula una mayor deuda. El independentismo, siempre existente allí, se vio impulsado en los últimos años por la crisis económica y se convirtió en el principal problema político que Rajoy tiene sobre la mesa de la presidencia del gobierno español.
Las últimas encuestas muestran que la mayoría de los catalanes quiere que se celebre la consulta. Los sondeos publicados difieren sin embargo en el apoyo a la independencia, que se mueve según se trate de unos u otros entre el 31 y el 54,7 por ciento.
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