Paseo Bulnes es intervenido con instalaciones a gran escala por alumnos de arquitectura
Una escalera de palets, una muralla de papel de diario, un circuito de globos plateados e inflados con helio y un cordón de esculturas de manos hechas de yeso, fueron instalados a en distintos puntos del Paseo Bulnes.
Este viernes el Paseo Bulnes amaneció intervenido por diversas instalaciones realizadas por 400 alumnos y académicos de arquitectura de la Universidad Mayor.
Esto se realizó en el marco de la 6ta versión del Concurso Escuela de Arquitectura de la Universidad Mayor, que se realiza una vez al año. Esta vez el desafío era generar una modificación del espacio público a gran escala y con escasos recursos.
Durante toda la semana los cuatro grupos participantes, conformados por 100 integrantes cada uno, trabajaron en una escalera de palets, una muralla de papel de diario, un circuito de globos plateado e inflados con helio y un cordón de esculturas de manos hechas de yeso; los cuales fueron instalados a las 9:00 horas, en distintos puntos del Paseo Bulnes.
"Las instalaciones que realizaron nuestros alumnos lograron captar la atención de los transeuntes y se generó una interacción muy interesante con cada una de las intervenciones. Esto comprueba que con pocos recursos podemos generar interacción entre los espacios públicos y la gente", aseguró
Fernando Marín, Decano de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Mayor, quien se mostró satisfecho con la actividad realizada por sus alumnos.
Finalmente el jurado conformado por Sebastián Gray, Arquitecto, Director Bienal de Arquitectura 2012; Giuliano Pastorelli, Arquitecto, Editor Jefe de Plataforma Arquitectura; Humberto Eliash, Arquitecto, Vice Decano Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile; Humberto Bonomo, Arquitecto, Profesor Escuela de Arquitectura Pontificia Universidad Católica de Chile; Víctor Gubbins, Arquitecto, miembro de la Asociación de Oficinas de Arquitectos (AOA) y Premio Nacional de arquitectura y Julen Birke, Artista y Docente; eligieron el circuito de globos como el flamante ganador del concurso.
Cuando culminó la actividad, los globos fueron soltados al aire e hicieron creer a varios santiaguinos que el cielo se plagaba de ovnis, la información se difundió rápidamente a través de Twitter y el tema pasó a convertirse en trending tópic.
"Sin tener la intención de hacerlo, se generó otra interacción en la ciudad con nuestra intevención, pero esta vez a una escala mayor, todas las personas que estaban en el centro miraban hacia el cielo sin entender mucho que estaba pasando", recordó Marín con humor.
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