Peso argentino informal amplía su diferencia en más 100% versus el cambio oficial
El peso en la plaza cambiaria marginal, también llamada "blue", cedía un 4% a un piso récord de 10,45/10,50 por dólar.
El peso argentino informal profundizaba su caída este miércoles, ampliando su diferencia con el tipo de cambio oficial a más de un 100% ante la alta demanda de la divisa en medio de unas restricciones cambiarias, dijeron operadores.
Ahorristas y empresas buscaban refugiarse en la moneda estadounidense para protegerse de la alta inflación en el país y ante la expectativa de que el Banco Central permitirá una mayor devaluación del peso en el mercado interbancario, lo que la presidenta Cristina Fernández ha negado.
El gobierno prohibió el atesoramiento de dólares hace un año para frenar una fuga de capitales alentada por la desconfianza que generan entre los inversores las políticas económicas intervencionistas de la mandataria argentina. Desde entonces, la demanda de moneda extranjera en el mercado paralelo se ha disparado.
El peso informal o "blue" caía un 4% a niveles mínimo históricos de 10,45/10,50 unidades por dólar.
En lo que va del año, la cotización del peso en el mercado negro acumula una depreciación de 35,2%, mientras que en la plaza interbancaria apenas retrocedió un 5,6% a valores actuales de 5,2100/5,2125 por dólar.
El Banco Central interviene regularmente en el mercado interbancario para evitar bruscas oscilaciones de la moneda local y comprar dólares para reforzar sus reservas internacionales, que han caído persistentemente en los últimos meses debido a que el gobierno las utiliza para financiar gastos y pagos de deuda.
"El mercado está totalmente tomador (comprador de dólares), aunque no hay muchos negocios porque no hay oferentes de dólares", comentó una agente del mercado.
Tampoco pareció aminorar la demanda de dólares el anuncio del martes del gobierno de que perdonará las deudas impositivas a quienes repatrien los dólares que tienen sin declarar en el exterior.
La propuesta podría implicar el ingreso de miles de millones de dólares atesorados en el extranjero, lo que reduciría la presión sobre el peso en el mercado paralelo. Sin embargo, algunos analistas se mostraron pesimistas sobre la eficacia de la medida porque dicen que el gobierno no genera suficiente confianza entre ahorristas e inversores.
La brecha cambiaria entre el mercado paralelo y el oficial no superaba el 100% desde hace cuatro décadas, comentaron operadores.
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