Presidente y timonel de RN abordan debate entre mesa y disidencia interna

El martes pasado, el Presidente Sebastián Piñera viajó a Valdivia, acompañado por el senador de la zona y timonel de RN, Carlos Larraín.

Durante la visita, ambos conversaron sobre diversos temas. Uno de ellos fue el escenario al interior de RN, marcado por la pugna de las últimas semanas entre la mesa directiva y un nuevo sector disidente, integrado por parlamentarios y personeros del ala liberal de la colectividad.

En el diálogo -dicen fuentes del partido-, Larraín relató a Piñera los esfuerzos que, a su entender, ha hecho la mesa para incluir y respaldar a figuras históricamente opositoras, entre ellas, la senadora Lily Pérez, hoy parte de la disidencia y a quien apoyó en 2009 como candidata a la Cámara Alta, pese a las discrepancias que tuvieron cuando ésta se desempeñó como secretaria general de la tienda en años previos.

De acuerdo con las mismas fuentes, Piñera aprovechó la ocasión para plantear a Larraín la necesidad de una mayor coordinación e integración entre todos los sectores del partido.

Aunque el Mandatario reiteró sus garantías de que se mantendrá al margen de la disputa interna. El anterior es un punto sensible para Larraín, pues algunos impulsores de la nueva disidencia son amigos del Mandatario, como el abogado Carlos Zepeda.

Además, el 24 de octubre, este grupo hizo su primera actividad pública, cita en la que participó la jefa de asesores del Segundo Piso de La Moneda, María Luisa Brahm, y el subsecretario de Interior, Rodrigo Ubilla, entre otros funcionarios de Palacio.

Dicha cita -y la asistencia de personeros del Ejecutivo- provocó la molestia de Larraín, quien presentó sus reparos ante el propio Piñera la semana pasada.

Con todo, el sector opositor al timonel se ha abocado en los últimos días al diseño de un calendario para promover nuevos encuentros del sector, esta vez en regiones. Así, se está preparando una cita con parlamentarios de la colectividad, al que le seguirá un encuentro ampliado en Valparaíso. Todo, con miras a las elecciones internas de marzo de 2012.