Primera querella por pacientes muertos en Hospital de Melipilla: el error "se silenció por parte de la administración"

La familia de las dos víctimas fatales, acusa que hubo un error en el suministro de medicamentos que podría constituir, al menos, los delitos de falsificación de instrumento y homicidio calificado.




El Juzgado de Garantía de Melipilla acogió la primera acción legal presentada en el caso de los dos pacientes fallecidos en el Hospital de Melipilla, presuntamente por un error en el suministro de un medicamento.

El abogado Critián Letelier, en representación de los familiares de las dos víctimas fatales, presentó una querella en contra de quienes resulten responsables "como autores, cómplices o encubridores por los delitos comettidos por funcionarios públicos".

Esto, tras la muerte de  Rosa Céspedes de 81 años, y Humberto González de 80 años en una supuesta negligencia, que además mantiene grave a un hombre de 74 años, y afectó a otros 11 pacientes.

Lo que hace más grave esta situación, dice el documento, es que una vez fallecidos los dos pacientes "un facultativo de turno del centro hospitalario denunciado, emite dos certificados de fallecimiento que contiene falsedad ideológica, porque no le constaba fehacientemente la causa de muerte".

"Una vez detectado el error que habían cometido, se silenció por parte de la administración del hospital esta grave situación", manifiesta la querella.

De acuerdo al recurso legal, el pasado 6 de agosto, los familiares de las víctimas fueron informados a través de los medios de comunicación que en Hospital de Melipilla "erróneamente, en apariencia, se había suministrado a 14 pacientes internados en dicho centro hospitalario, una dosis de insulina en forma intravenosa que causó la muerte en poco tiempo, entre el suministro y su fallecimiento, a dos personas".

"La conducta desplegada por el agente consistió en que, personal paramédico confundió el medicamento Heparina con el fármaco Insulina", asegura.

El libelo da cuenta, que según la información que maneja el querellante, en la farmacia del hospital habían 4 ampollas de insulina, en momentos que sólo deberían existir dos, además, indica que "no hay un protocolo que establezca un procedimiento" respecto a suministro de medicamentos.

Hechos, que según el abogado Letelier, podrían configurar los delitos de falsificación de instrumento, incumplimiento de obligación de denunciar, homicidio calificado y lesiones graves.

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