Reino Unido pide al entorno de Muammar Gaddafi que lo abandone

El ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, pidió hoy al círculo cercano al líder libio Muammar Gaddafi que lo abandonen, tal como lo hizo el canciller, Musa Kusa, que llegó anoche a Reino Unido, procedente de Túnez. Kusa fue interrogado, pero no se le ofreció inmunidad frente a un proceso judicial británico o internacional.

Para Hague, la decisión del canciller libio de dejar de formar parte del entorno del coronel demuestra que el régimen libio está "fragmentado, presionado y se está desmoronando".

"Gaddafi se debe estar preguntando ahora quién será el próximo (en abandonarlo)", dijo Hague. Agregó que el líder libio perdió toda "legitimidad" y pidió a los políticos cercanos a él que lo abandonen y se unan a "un futuro mejor para Libia que permita una transición política y una reformas que cumplan con las aspiraciones del pueblo libio".

Kusa decidió hablar con funcionarios británicos, incluso con los miembros de la embajada del Reino Unido en Trípoli, que ahora tiene sede en Londres, y con el embajador Richard Northern. La confirmación oficial de la renuncia de Kusa se produjo después de intensos rumores acerca de sus intenciones de desertar.

La agencia tunecina TAP había informado el martes de que había llegado a Túnez, donde no había explicado las razones de su viaje. Cuando en las últimas horas se difundió que estaba camino del Reino Unido, el régimen libio informó que viajaba para llevar a cabo una misión diplomática por encargo de Gaddafi.

Pero una vez que tuvo constancia de sus intenciones la cancillería británica se apresuró a informar de que su intención era renunciar a su cartera como jefe de la diplomacia del régimen libio.

Kusa, que como diplomático trabajó varios años en Londres, es considerado una figura decisiva para convencer al coronel Gaddafi de que renuncie al terrorismo.