Saif al Islam Gaddafi afirma que su padre está bien y que siguen en la batalla contra los rebeldes

El segundo hijo del fugitivo coronel Muammar Gaddafi, Saif al Islam reapareció hoy a través de un mensaje de audio, transmitido por un canal árabe cercano al régimen, y aseguró que las fuerzas leales a su padre siguen combatiendo a los insurgentes y que "la resistencia continúa".

Saif, quien hace dos semanas reapareció libre en las calles de Trípoli, pese a que los rebeldes habían anunciado su captura, dijo que el coronel está bien, que incluso toman té juntos, y que pronto liberarán la Plaza verde de la capital.

"Estamos peleando y tomando té y tomando café, con nuestras familias, y peleando", apuntó a la cadena Al-Urubah .

Según Saif, el régimen cuenta con más de 20 mil jóvenes armados para luchar contra los rebeldes y pidió a los libios pelear contra los "pandilleros, las "ratas" y los "mercenarios".

"Les hablo desde un suburbio de Trípoli. Queremos tranquilizar al pueblo libio, estamos siempre aquí, la  resistencia continúa y la victoria es cercana", aseguró Saif. 

Sin embargo antes del mensaje de Saif, se divulgó otro audio, más moderado, del tercer hijo del coronel, Saadi Gaddafi, quien afirmó que está "listo" para tratar con los rebeldes y hablar "en nombre" de su padre, quien "querría un rol" en el futuro gobierno libio. Saadi realizó esas declaraciones en una conversación telefónica con la cadena de televisión Al Arabiya. Incluso dijo que estaba dispuesto a entregarse si era neceario para detener el baño de sangre.

Un funcionario de la oposición había dicho hoy que Saadi  "negociaba" su rendición. Pero esa versión fue desmentida por el propio Saadi, mediante  un correo electrónico que envió a la cadena CNN.  "No hay negociaciones con el CNT y no me rendiré", manifestó  Saadi. "Puesto que (los rebeldes) no quieren negociar, no pienso  ir hacia ellos y rendirme. Han ya asesinado a millones de  personas y destruido el país".

CANCILLER
En tanto, los rebeldes capturaron hoy al ministro de Relaciones Exteriores de Gaddafi, Abdelati Obeidi, en su granja de Janzour, un suburbio al oeste de Trípoli, según consignó la agencia Reuters.

Las fuerzas anti Gaddafi gritaban "Allahu Akbar" (Dios es grande) al detenerlo, según un corresponsal de la agencia de noticias.