Teatro UC montará 8 obras chilenas en el Bicentenario

El Teatro Universidad Católica celebrará el próximo año el Bicentenario sólo con dramaturgia chilena, a través de un repertorio de alto valor patrimonial, que mezcla jóvenes autores y figuras consagradas. Un lujo que no cualquier teatro se puede dar.

Dirigida y escrita por Luis Barrales (HP, Niñas araña), la obra Buena gente narrará tres historias de vidas ejemplares. La primera de ellas es el caso real de una chinchorrera chilena que, a pesar de su extrema pobreza, cuida a 14 hijos en el norte del país a través de su humilde oficio de recoger restos de carbón. La segunda es la vida del joven chino que se enfrentó a los tanques en la matanza de la Plaza de Tiananmen en 1989. El último caso es el mito de Prometeo, quien es condenado a que un águila devore eternamente sus entrañas, luego de robar el fuego de los dioses para entregárselo a los desprotegidos humanos.

"La obra es una reflexión política sobre estos subversivos actos de bondad y sacrificio", adelanta Barrales, joven dramaturgo que ha impactado en los últimos años con reveladores textos sobre la contingencia local.

En paralelo, la compañía Tryo Banda Teatro, que lidera Francisco Sánchez, montará Jemmy Button. Escrita por Ximena Carrera y dirigida por Sebastián Vila, en este espectáculo tres juglares contarán la odisea de Jemmy Button, indígena de Tierra del Fuego que fue llevado a Inglaterra en 1830, a bordo del barco Beagle, por el oficial británico Fitz Roy. "En este viaje, Jemmy es civilizado y educado a la inglesa, para ser devuelto a su tierra tres años después, en el mismo barco donde Charles Darwin ya vislumbra su revolucionaria teoría del origen de las especies", apunta Inés Stranger, directora del Teatro UC.

Asimismo, los dramaturgos Coca Duarte y Cristián Ruiz escriben una obra para el público juvenil que mezclará teatro y física. Dirigida por Elvira López, el texto narra las andanzas de un grupo de jóvenes y un profesor.

El resto de la programación tiene aire a déja vu. Se presentarán cinco obras del homenaje a los 200 años de teatro chileno del Festival Santiago a Mil 2010: Entre gallos y medianoche (1919), un sainete de Carlos Cariola, dirigido por el premio nacional Ramón Núñez, y Topografía de un desnudo (1967), obra de Jorge Díaz, dirigida por Alexis Moreno, inspirada en una matanza de mendigos en 1963 a manos de los escuadrones de la muerte de Brasil para facilitar la construcción de un barrio residencial. Completan la selección las reescrituras a cargo de la compañía La Puerta de La mantis religiosa (1971), de Alejandro Sieveking; Los invasores (1963), de Egon Wolff, y Amo y señor (1926), de Germán Luco Cruchaga.