Valle del Colca: Profundidades peruanas

Muchos de los turistas chilenos que visitan este privilegiado lugar, lo realizan como una excursión anexa desde Arequipa, una pequeña "desviación" de la ruta que más tarde los conducirá a Machu Picchu. Las posibilidades de visitarlo y recorrerlo van desde un par de días, hasta casi una semana, pero no importando la extensión de la excursión, el punto de partida obligado será una ajetreada y caótica mañana en el terminal de buses de la ciudad. El objetivo es tomar un bus con destino a Chivay, pequeño pueblo que sirve de alojamiento y aclimatación para los miles de metros de altura. Por delante, cuatro horas de viaje entre trabajadores locales, mochileros europeos y gringos con sus respectivos guías, escolares camino al colegio y ancianas con trajes tradicionales.

En Chivay existe una oferta de alojamiento con variados hoteles de dos y tres estrellas, un hotel de cuatro y muchas pensiones de una. También cuenta con todos los servicios necesarios: internet, restaurantes, tiendas y minimarket para  abastecerse, farmacias, etc., además de unos baños termales, La Calera, absolutamente recomendables. Desde allí se parte al día siguiente con un frío que cala los huesos, pero basta mirar por la ventana del bus para ver que niños y ancianos ya están en la calle y ni parecen sentir el menor atisbo de incomodidad. Dejamos Chivay e iniciamos una ruta donde las curvas y los colores serán nuestros constantes compañeros.

VALLE PROFUNDO
Técnicamente, el Cañón del Colca es una falla de la corteza -una gran grieta que corre por 100 km- que se localiza entre dos grandes volcanes: Coropuna (6.425 m) y Ampato (6.310 m), en el sur de Perú. Son cerca de 14 los pueblos que alberga el valle del Colca, cuyas puertas se mantuvieron cerradas por siglos. Pueblos que durante cientos de años quedaron al margen de la modernidad y por los cuales el tiempo pareció no pasar, ya que han sabido conservar una rica tradición cultural, preservando sus fiestas religiosas, su folclor y, por sobre todo, su notable condición productora de granos. Se dice que estos 14 poblados fueron establecidos por los españoles como forma de control, invasores que en su tiempo se encontraron con el mismo escenario  que comienza a aparecer a través de las ventanas del minubús: las terrazas de cultivo. Son verdaderos jardines colgantes, más impresionantes que los del propio Machu Picchu, extendidos en cerros y laderas que llenan de diversos tonos de verde el paisaje.

El motivo principal de la visita a este lugar son los cóndores, amos y señores del Colca, que tienen un punto en el que dan rienda suelta sin pudores al más puro exhibicionismo: Cruz del Cóndor. Se encuentra internándose por el cañón, a 60 km de Chivay.

LA CRUZ DEL CONDOR
Al llegar ahí, a 3.200 metros de altura, varios minibuses con turistas se nos han adelantado. Hay un ordenado tumulto que, curiosamente, está en silencio. Un silencio de espectador. Todos miran hacia el precipicio, como en un partido de fútbol a la cancha.

Es el momento de tomar ubicación, para presenciar el espectáculo en este anfiteatro natural, con el cañón y sus escarpadas paredes a un metro de nuestros pies y el río Colca corriendo a más de un kilómetro más abajo de nuestro cuerpo. Es cuando aparece (a pesar de las advertencias de que algunas veces los cóndores no se muestran), una enorme sombra en la ladera del cañón y, en una fracción de segundo, es posible apreciar al más bello e imponente cóndor planeando con una majestuosidad inimitable. Pero aun cuando no se termina de salir del asombro, aparece otro, y ¡otro! Y ¡otro más! Al poco rato contamos 14. Una experiencia sublime en uno de los lugares con mayor contraste entre alturas y profundidades del planeta.

COORDENADAS EN COLCA
La distancia entre Arequipa y el Cañón del Colca es de 165 km por camino de tierra, que se recorren en cuatro horas, aproximadamente. El camino tiene varias curvas en subida y bajada y requiere un pequeño esfuerzo por el tema de la altura, pero nada exagerado. A propósito de la altura, se recomienda evitar actividades durante las primeras horas e, incluso, el primer día. Junto con eso, una dieta liviana y tomar mate de coca para evitar enfermarse. La estadía mínima es de dos días desde Arequipa, para alcanzar a visitar el cañón y sus principales atractivos, alojando en Chivay. De ahí para arriba si la intención es sumar actividades como trekking, canotaje o excursiones en mountain bike. Existen excursiones bastante convenientes desde Arequipa, desde poco más de US$ 100, incluyendo alojamiento, comidas, paseos y entrada al valle.

Sky Airline tiene un programa de 5 días y 4 noches para visitar el Cañón del Colca, con alojamiento y pasajes desde US$ 373. Lan vuela a Arequipa vía Lima.

Inkari Eco Lodge: lo mejor de Chivay, son habitaciones y cabañas relativamente nuevas, con hermosas vistas. Desde US$ 85. www.inkarihoteles.com