Villalobos llama a retiro a 11 generales y mantiene a oficial indagado en fraude

Cuando habían transcurrido menos de 24 horas desde que se conociera el resultado de la elección presidencial, el general director de Carabineros, Bruno Villalobos, dio a conocer el alto mando 2018 de la policía uniformada.

Si bien el anuncio se esperaba para octubre o noviembre, como tradicionalmente suele ser, el fraude de $ 26 mil millones al interior de la institución y la elección de la máxima autoridad del país retrasaron los planes.

Las semanas de espera no fueron bien recibidas al interior de la institución, señalan algunas fuentes policiales. Existía nerviosismo, pues no había claridad respecto a qué oficial se mantendría y cuál debería dejar Carabineros.

Finalmente, a las 13.00 la noticia fue entregada en persona por Villalobos a los generales inspectores del alto mando, su círculo más cercano y quienes tienen el mayor rango tras él.

En total, 11 generales pasaron a retiro (misma cifra que en la reestructuración 2016-2017), entre ellos dos generales inspectores. Se trata del subdirector de Carabineros, Marcos Tello, y el jefe de la Zona Metropolitana, general Alfredo Lagos.

Ente los otros nueve oficiales que pasaron a retiro están el general Juan Irigoyen, de la Dirección de Seguridad Privada y Control de Armas y el general Jorge Serrano, de la Dirección de Gestión de Personas.

La salida de Serrano era algo esperable al interior de la policía uniformada, debido al factor "fraude". El ex general figura como querellado por el Consejo de Defensa del Estado (CDE) en la causa que lleva adelante el fiscal Eugenio Campos, por un supuesto reembolso irregular por cerca de $ 21 millones a la institución en 2011, el que habría sido financiado por el ex general director Eduardo Gordon.

La subdirección dejada por Tello será asumida por el general Julio Pineda, ex jefe de la Dirección Nacional.

En tanto, quienes ascienden a generales inspectores son el general Hermes Soto, quien asumirá la jefatura de la Zona Metropolitana, y Leonidas Venegas, que pasará a encabezar la Dirección Nacional de Personal.

No obstante, si bien algunos habían apostado a que Carabineros realizaría una "cirugía mayor" entre los altos oficiales, los cambios de Villalobos fueron catalogados como "moderados" o incluso "leves". En lo particular, hubo una situación que llamó especialmente la atención: el caso del general Manuel Letelier, director de Bienestar.

Este oficial se mantendrá en su cargo, pese a estar en la mira del Ministerio Público. El general Letelier declaró en calidad de imputado ante el fiscal Campos el 29 de julio de este año y según los antecedentes de la causa, se le investiga luego de que una institución bancaria alertara a la Unidad de Análisis Financiero (UAF) sobre una operación sospechosa de $ 500 millones por parte del alto oficial.

En lo que respecta a los generales inspectores, a la salida de Tello se sumó Alfredo Lagos, quien ocupaba el cargo de jefe de la Zona Metropolitana.

El resto de esta categoría de generales se mantuvo igual. Es el caso del general de la Dirección de Orden y Seguridad, Víctor Herrera Pintor, sindicado como uno de los supuestos sucesores del general Villalobos en caso que termine su mandato en 2019. Incluso, el nombre de Herrera es del gusto de algunos miembros del próximo gobierno.

El otro que se mantiene en el cargo es el jefe de Inteligencia, general Gonzalo Blu, quien junto a Herrera también se perfila como uno de los posibles reemplazantes de Villalobos. También mantendrá su cargo el inspector general de Carabineros, general Nabih Soza.

Para el senador PPD Felipe Harboe, el anuncio "es un alto mando que mezcla experiencia con renovación y tiene el desafío de mejorar la función preventiva para disminuir la delincuencia".

En esa misma línea, el diputado RN Gonzalo Fuenzalida manifestó que "creo que sigue una línea conservadora y me parece bien por el momento que vive la institución. Ayuda a no generar más ruido para abocarse en los desafíos del próximo año".

En lo operativo, en tanto, también hubo un cambio de jefatura en la Región de La Araucanía. Este cargo será ocupado por el general Andrés Gallego y su antecesor, el general Christian Franzani, pasa a la Seguridad Privada y Control de Armas.

Hoy, el general Villalobos llegó hasta la casa del presidente electo, Sebastián Piñera, en Las Condes, en compañía del director general de la PDI, Héctor Espinosa. Piñera recibió a ambos por separado.

La reunión entre Piñera y Villalobos fue observada con cautela por parte de algunos funcionarios de la institución. Esto, dado que durante la campaña, el presidente electo indicó en mayo que "Carabineros necesita una profunda modernización. No sólo administrativa, para garantizar transparencia y buen uso de los recursos, sino que operativa".

Sin embargo, en último debate presidencial, el 11 de diciembre, Piñera dijo que "las personas que depende de la confianza exclusiva del presidente deben ser evaluadas por el presidente. A la Presidenta Bachelet le corresponde esa decisión (de una eventual solicitud de renuncia)".