Gobierno da portazo a propuesta de Chile Vamos para postergar alza de pensiones para después de año electoral

Tras una semana de tensiones, producto de emplazamientos cruzados, la calma volvió a la Comisión de Trabajo del Senado, que sesionó este miércoles para continuar la discusión de la reforma previsional.

El cambio de tono fue evidente. Incluso, al inicio de la sesión el presidente de la instancia, el senador Juan Antonio Coloma (UDI), propuso un itinerario final para que el Senado despache el proyecto a más tardar la tercera semana de enero, lo que fue aceptado por la unanimidad de los presentes, tanto senadores titulares de la comisión, como también por otros legisladores participantes.

“Vamos a tratar de coincidir en todo lo que se pueda”, dijo Coloma, cuyo compromiso fue valorado también por los senadores del oficialismo.

“Más allá de las escaramuzas... a Ud. le agradezco (...). Debemos felicitarnos entre todos, porque hemos cumplido (con los plazos)”, comentó el senador y jefe de bancada del PS, Gastón Saavedra, dirigiéndose al senador Coloma.

Sin embargo, casi al final de encuentro -en el que se analizó la propuesta del gobierno para aumentar la Pensión Garantizada Universal (PGU)- el senador Luciano Cruz-Coke (Evópoli) puso en debate un nuevo tema sensible para la derecha: el posible efecto electoral que tendría elevar este beneficio social en plena campaña presidencial y parlamentaria, que culminará con las elecciones de noviembre y diciembre.

Durante la sesión de la Comisión del Trabajo, Cruz-Coke pidió postergar el alza de la PGU de los actuales 214 mil pesos a $250 mil. “Todos somos conscientes que esta discusión está atravesada por la opinión pública y también por el asunto político eleccionario”, dijo y recordó que el año pasado, en el que hubo elecciones regionales y municipales, también se postergó la reforma de pensiones para “separar los procesos electorales de los procesos legislativos”.

Cruz-Coke calculó que si el aumento es promulgado en marzo, se haría efectivo cerca de octubre, es decir, en pleno período electoral.

“¿Hay alguna forma de evitar eso? (Para) después creo yo. Alejarlo. Esto es cosa de un par de meses, se podría alejar o eventualmente imputar que se pague a partir de que sea la elección. Porque si no, yo temo, por lado y lado, que esto va a terminar politizado y creo que es lo que hay que evitar”, advirtió.

La solicitud de Cruz-Coke, que sinceraba una inquietud velada que existe en la derecha, sin embargo, tuvo una rápida respuesta negativa de la ministra del Trabajo, Jeannette Jara (PC). “La verdad es que no sé si esa podría ser una razón válida para la ciudadanía. Esperamos de todas formas poder seguir conversando de esto, porque la gente lleva tanto tiempo esperando y uno podría preguntarse qué pasa si en esa elección se produce luego una segunda vuelta, ¿tendríamos que volver a esperar a que pase esa segunda elección?”, indicó la ministra.

Y agregó: “La verdad es que no sería justo para las personas que están esperando. Quiero ser bien clara. Para todas las votaciones que saquemos adelante, ahora necesitamos votos de la oposición, porque estos son proyectos de alto quórum. Hay una responsabilidad que tenemos oficialismo y oposición en concordar cosas que sean razonables para la ciudadanía y esperar a que la PGU se reajuste después de una elección, con una posibilidad de una segunda vuelta, creo que no sería buena cosa para la ciudadanía”.

La secretaria de Estado, en todo caso, le quitó dramatismo a todas estas señales que ya son detalles finales de un inminente acuerdo, que igualmente podría ser parcial.

“Todo lo que ha pasado en los últimos días lo tomamos como parte del proceso. No hay que dramatizar los elementos que a veces tensionan las discusiones, porque son parte de una negociación y lo que tenemos que hacer todos, es mantener el espíritu pensando en el bien de Chile”, añadió en referencia a las críticas opositoras a las declaraciones del Presidente Gabriel Boric, quien emplazó a la derecha a ceder en la recta final de la negociaciones.

En línea con Jara, los senadores Ricardo Lagos Weber (PPD), Gastón Saavedra (PS) y Alejandra Sepúlveda (Ind. FRVS) también rechazaron la idea de Cruz-Coke.

No obstante, el senador Coloma (UDI), en apoyo de su par de Evópoli, admitió que existen “fantasmas de lado y lado” y que efectivamente podría haber interpretaciones “con un tema electoral”, que -a su juicio- “es mejor evitar”.

La discrepancia, sin embargo, no quedó resuelta, pero la derecha eventualmente tendría votos en el Senado para imponer una norma transitoria que postergue el alza de la PGU.

En tanto, según el cronograma acordado este miércoles, Coloma abrió un plazo para presentar indicaciones hasta el lunes 13 de enero. Ese día, el gobierno presentaría sus enmiendas que contendrían gran parte de los acuerdos alcanzados, ad referéndum, en la Comisión de Trabajo.

Este martes, Jara no quiso anticipar si esas indicaciones incluirían, además, temas que la derecha eventualmente rechazaría, por ejemplo, la idea de separar la industria de las AFP, entre entidades de inversiones y administradoras.

A la espera de esa decisión del Ejecutivo, la comisión acordó votar las modificaciones, entre miércoles 15 y jueves 16 de enero.

Luego, el proyecto pasaría a manos de la Comisión de Hacienda, que le daría una rápida revisión, para permitir que la sala del Senado se pronuncie entre el 21 y 22 de enero.

Con ello, la Cámara de Diputados podría volver a discutir la reforma en la última semana de enero para decidir si se despacha a ley o se envía a una comisión mixta para resolver discrepancias.