La apuesta del gobierno para aterrizar las reformas

Piñera
El Presidente Sebastián Piñera durante la presentación, este jueves, del proyecto de modernización laboral. Foto: Mario Téllez

Piñera anunció ayer el segundo proyecto de modernización laboral, con lo que, a juicio del Ejecutivo, ya están dados a conocer los ejes de todos los proyectos fundamentales del gobierno, iniciando así una nueva etapa. "Se empieza a configurar el sello central de nuestro programa", dijo Blumel a La Tercera.


"Es la conclusión de una etapa simbólica relevante". Así calificaban este jueves en La Moneda el anuncio que hizo el Presidente Sebastián Piñera del segundo de tres proyectos de modernización laboral: el de adaptabilidad, con el que se busca conciliar el trabajo, la familia y la inclusión laboral.

Si bien aún queda pendiente el tercer proyecto de esa reforma -que corresponde al que modifica aspectos de la negociación colectiva-, con el anuncio de la iniciativa en el gobierno dicen que, en términos de relato, se inicia un nuevo periodo para el Ejecutivo, en el que ya están presentadas las cuatro reformas fundamentales: además de la laboral, la tributaria, de pensiones y la de salud.

En el gobierno explican que la iniciativa firmada este jueves apunta a fortalecer la clase media -uno de los tres ejes que definió La Moneda para este segundo año de gobierno, junto con seguridad ciudadana y "Chile en Marcha"-, porque busca compatibilizar la vida de las personas con el trabajo. Y agregan que, por esta misma razón, el proyecto que queda pendiente en materia laboral no configura parte sustancial del relato, debido a que "es más ideológico". Así, en el gobierno dicen que "afecta menos directamente a la gente".

De hecho, La Moneda prevé una tramitación más compleja con la oposición para ese último proyecto y, por ese motivo, definieron como estrategia dividir en tres la reforma laboral, con el objetivo de agilizar la discusión en el Congreso.

En este contexto, la idea ahora es comenzar a fortalecer las cuatro reformas públicamente y explicar los beneficios que tiene cada una de ellas. Se trata -dicen en La Moneda- de "aterrizar" las reformas ante la opinión pública. Por eso es que se realizará un despliegue especial en terreno para cada una de esas iniciativas.

En el Ejecutivo afirman, además, que esta nueva etapa se coronará con la presentación de la red de clase media protegida, que corresponde al marco institucional que busca proteger a ese segmento de la sociedad ante eventos críticos de la vida y que está estipulado que se dé a conocer este mes.

"Con el ingreso al Congreso de la reforma a la salud y de la segunda parte de la modernización laboral se empiezan a completar las reformas planificadas para la clase media", dijo este jueves a La Tercera el ministro de la Segpres, Gonzalo Blumel.

El secretario de Estado sostuvo que con estas iniciativas en el Congreso "se empieza a configurar el sello central de nuestro programa de gobierno".

El diseño del Ejecutivo para esta etapa implica avanzar lo más rápido posible en los proyectos que se encuentran en el Congreso, pero también en las medidas administrativas. Así, fuentes del gobierno dicen que se irá dosificando el ingreso al Parlamento de las iniciativas pendientes.

En el Ejecutivo recalcan que es relevante avanzar con velocidad debido a que el próximo año la agenda estará enfocada, en parte, en los próximos desafíos electorales, justamente una fase en la que -dicen- "hay que dar cuenta de los avances".

En ese sentido, por ejemplo, en el gobierno esperan que la reforma tributaria se discuta entre dos o tres meses más en la Cámara, y que el segundo semestre ya esté en el Senado. Ese proyecto, en todo caso, debe sortear el principal nudo que hasta ahora ha enfrentado a La Moneda con la oposición: la reintegración del sistema. En el caso de la reforma a las pensiones, en el gobierno apuestan a que sea ley durante este año. Sin embargo, también hay puntos complejos en la discusión que se relacionan con quién administrará el aumento de la cotización. En tanto, frente a las reformas a la salud y laboral, el gobierno evita imponerse un plazo y quiere ir viendo cómo avanza la discusión en el Parlamento.

"Lo importante es que la gente está viendo que hay avances", aseguró el presidente de RN, Mario Desbordes, advirtiendo que aún "falta toda la tramitación legislativa, con una oposición muy cerrada, por lo tanto, vamos a tener una discusión de estos temas por un buen rato más".

Control de la agenda

En el oficialismo, en privado, si bien destacan el inicio de esta nueva etapa, recalcan que para que tenga éxito y cale ante la opinión pública es "necesario mantener el control de la agenda".

Además, advierten que el Ejecutivo debe mantenerse actuando dentro de las iniciativas por las cuales fue elegido este gobierno y no -dicen- "subirse a la contingencia", como ocurrió en el caso de los medidores eléctricos.

Según los análisis que hacen al interior de Chile Vamos, la agenda del gobierno retrocede "por temas que pudieron evitarse". En esa categoría, por ejemplo, incluyen la fallida designación de Pablo Piñera como embajador en Argentina; la polémica nominación de la agregada comercial Fernanda Bachelet en Nueva York; el viaje a Harvard del ministro Felipe Larraín y, ahora último, incluir a los hijos del Presidente en la gira a Asia.

"A veces es natural que la contingencia se toma parte de la agenda, pero el gobierno debe atenerse a los hitos principales que le dieron mayoría", sostuvo el jefe de bancada de Evópoli, Luciano Cruz-Coke.

R El Presidente Sebastián Piñera durante la presentación, ayer, del proyecto de modernización laboral.

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