Tohá ante emplazamientos para revocar indultos: “Nuestro ordenamiento jurídico no prevé que se retrotraigan”

La trama de los indultos continúa. Y es que a pesar de que el gobierno cerrara la puerta a la posibilidad de revocar los indultos concedidos por el Presidente Gabriel Boric -y que desataron consecuencias políticas en el equipo de la actual administración-, aumentó la presión para que se anulen los beneficios carcelarios otorgados.

Las peticiones no solo provienen de la oposición, sino también de personeros del oficialismo, desde donde incluso algunos parlamentarios llamaron al jefe de Estado a “reorganizar su gabinete”.

En medio de los emplazamientos, la ministra del Interior, Carolina Tohá descartó esta mañana que exista un mecanismo para retrotraer los indultos.

“Sigue la polémica de los indultos, pero quiero decir, hay que aprender en política a tener cuerdas separadas para las cosas, (...) y quienes tengan dudas presentarán las acciones que quieren presentar donde correspondan”, comenzó diciendo la jefa de gabinete, en conversación con Tele13 Radio.

Sin embargo, de inmediato advirtió que ante la posibilidad de revocar los beneficios carcelarios “no existe ese mecanismo”.

“No es que el Ejecutivo quiera o no quiera, o le parezca o no le parezca, no hay una modalidad por la cual se retrotraigan los indultos. Distinto sería el caso que por alguna razón no fueran válidos”, señaló la secretaria de Estado, pero puntualizó que “hasta ahora los equipos jurídicos que examinaron esto, que son fundamentalmente los equipos del Ministerio de Justicia, revisaron todos los procedimientos y parecen estar hechos correctamente”.

“Nadie ha sabido decir ‘mire, con tal mecanismo usted lo puede retrotraer’. Eso nuestro ordenamiento jurídico no lo prevé, que se retrotraigan indultos”, insistió Tohá, y -asimismo- remarcó que “no he sabido de ninguna razón que ameritara dar por inválidos esos indultos”.

Ante las críticas, la ministra del Interior también aclaró que el tipo de indulto que otorgó el Presidente Boric se denomina “conmutativo”, el cual -según explicó- “no anula la pena, sino que la conmuta”.

“La pena sigue vigente, pero la persona en lugar de seguir presa, lo que hace es que queda sometida a otro tipo de medidas, que son el arraigo nacional y la firma mensual. En esa condición quedaron los indultados, salvo uno de ellos que entiendo que ya estaba con libertad cuando se le indultó”, comentó la secretaria de Estado.

En ese sentido, también puntualizó que el uso de este tipo de beneficio carcelario no debilitan las políticas de seguridad y que el “reproche” del gobierno a la violencia, así como también el respaldo a las policías, “no se ponen en cuestión”.

“Los indultos no son una política de seguridad, no reemplazan la acción de la justicia, no implican un cambio en el reproche penal de las acciones por los cuales una persona está condenada”, expresó Tohá.

“Nunca jamás ha competido o ha entrado a debilitar las políticas de seguridad y la acción de los tribunales la existencia de los indultos”, agregó, y recalcó que “nuestro reproche a la violencia, nuestro reproche al crimen sin duda alguna, y nuestro respaldo a las policías no se pone en cuestión porque el Presidente haga ejercicio de esta facultad”.

Una de las consecuencias que desencadenó la trama de los indultos fue la renuncia de la ahora exministra de Justicia, Marcela Ríos.

La otrora secretaria de Estado fue cuestionada por los errores en la ejecución de los beneficios carcelarios e, incluso, la oposición levantó diversas arremetidas en su contra. Una de ellas fue la presentación de un acusación constitucional en su contra, que persistirá a pesar de haber presentado su dimisión.

La jefa de gabinete, esta mañana, respaldó la gestión de Ríos, pues -a su juicio, la exautoridad de gobierno vivió situaciones “injustas” a cargo de la cartera.

“La ministra Marcela Ríos, con la que me tocó trabajar intensamente en estos meses, pero que conocía desde antes, desde el rol que ella cumplió por largo tiempo en el PNUD (...), vivió realmente mientras era ministra situaciones muy injustas, una crítica muy cerrada con ella”, señaló.

“Yo creo que realmente ha sido muy destemplado la forma en que en algunos momentos a ella se le trató, porque es una profesional, una servidora pública muy seria, muy comprometida. Y para ella mi cariño y todo mi respeto”, agregó.

La dimisión de Ríos se concretó el sábado, junto a la del ahora exjefe de gabinete del Presidente Boric -e íntimo amigo-, Matías Meza-Lopehandía. Fue el propio Mandatario quien confirmó la salida de ambos del gobierno, en una declaración en la que reconoció que existieron “desprolijidades” en la ejecución de la facultad presidencial.

Sobre dichas “desprolijidades”, Tohá explicó que el Presidente tuvo “a la vista” las solicitudes de indulto, pero que en los “antecedentes de los historiales (de los condenados), ahí lamentablemente parece ser es donde hubo dificultades”.

Según indicó, durante el proceso trabajan “muchos equipos” y que, en detalle, “en estos distintos grupos que intervinieron, unos son del ministerio, otros son los filtros que están más cerca del Presidente, en esos espacios aparentemente es donde hubo descoordinaciones o información completa”.

Ante eso, la ministra del Interior abordó la decisión del Mandatario de aceptar la renuncia de Ríos y Meza-Lopehandía.

“Es muy raro que un gobierno reconozca que en ciertos procesos hubo situaciones que no estuvieron realmente coordinadas como debieron y que, en consecuencia, haya decisiones como las del Presidente de que una ministra no continúe en su cargo y su propio jefe de gabinete, su mano derecha de todos los días, no continúe en su cargo”, señaló al respecto Tohá.

Y es que, a su juicio, la decisión de aceptar la dimisión de ambos se traduce en una señal para avanzar en niveles de “impecabilidad” en la gestión.

“Al tomar esta decisión también está dando una señal que es muy importante y en Chile poco común. En chile rara vez se hace esto, que es decirle a sus colaboradores aquí las responsabilidades políticas se van a hacer valer y cuando sucedan situaciones de este tipo, más allá de todo el aprecio, afecto y valor que tenga la gestión que algunas personas hayan hecho en mi gobierno, yo voy a hacer valer esas responsabilidades”, subrayó.

“Es importante que empecemos a generar la idea de que hay que responder por un nivel de impecabilidad también, y cuando ello no pasa que tenga consecuencia”, sentenció la secretaria de Estado.

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