Ministro de Interior y los “10 puntos esenciales” de Sebastián Piñera para la nueva Constitución: “Un salto al vacío sería sin dudas un gran problema para Chile”

La mañana de este domingo 13 de septiembre estuvo marcada por la realización de la tradicional ceremonia Te Deum Ecuménico, la que contó con una cantidad reducida de asistentes -considerando la emergencia de salud que se vive a nivel mundial-.

Fue en la misma instancia que el Ministro de Interior, Víctor Pérez, se dirigió a la prensa respondiendo a diversos temas de contingencia, entre ellos, el documento presentado por el Presidente Sebastián Piñera -entregado a los miembros de su gabinete- en el que detalla “10 puntos esenciales” que -a su juicio- deben ser considerados en una nueva Constitución.

“Creo que lo importante aquí es que todos los chilenos hagamos un debate sobre los temas institucionales y los temas constitucionales, y ese debate es en base a propuestas, en base a ideas, en base a las convicciones que cada uno tiene”, dijo el Ministro de Interior.

“Chile merece que el debate sea con altura de miras y que sea con propuestas concretas. Un salto al vacío sería sin dudas un gran problema para Chile”, añadió refiriéndose a la posibilidad de comenzar una Carta Magna a partir de una “hoja en blanco”.

“Por lo tanto, lo que hace el Presidente, creo que es contribuir a ese debate y que ese debate sea fecundo. El 25 de octubre próximo, tendremos un plebiscito seguro e informado -como es el objetivo del gobierno-. Los chilenos elegirán el camino por el que ese debate deberá hacerse, pero para ese camino, tenemos el deber de contribuir para que sea con altura de miras y que sea fecundo para el futuro del país”, concluyó.

Los aspectos contemplados en este decálogo presentado por el Presidente Piñera son: el Rol del Estado, Familia, Derechos Civiles y políticos, Derechos económicos, sociales y culturales; Sociedad inclusiva y diversa, orden público, medio ambiente, separación de poderes del estado, responsabilidad de las autoridades y transparencia; y descentralización.

El Presidente de Partido Socialista, Álvaro Elizalde, dijo: “Es hora de escuchar a los mandantes, esto es, la ciudadanía, y no a los mandatarios. De eso se trata el proceso constituyente, de escuchar al soberano: el pueblo".

“El Presidente sigue sin entender el proceso social y político que vive Chile. Su decálogo es un ‘simple refrito’ de las disposiciones de la actual Constitución, que no se hace cargo de las profundas demandas ciudadanas, como los derechos sociales, un sistema de salud digno y universal, un verdadero sistema de seguridad social, y una efectiva protección del medioambiente. Reproduce el principio neoliberal de subsidiariedad. En síntesis, más de lo mismo cuando Chile exige cambios profundos”, dijo el senador respecto de la propuesta.

Carlos Maldonado, Presidente del Partido Radical, coincidió con que este documento presentado por el Presidente Piñera, es una síntesis de la Constitución que nos rige actualmente.

“El decálogo de Sebastián Piñera es un simple resumen de la Constitución actual. Es decir, está por el Rechazo, quisiera que se mantuviera la Constitución actual. Como sabe que eso no ocurrirá, trata de promover sus contenidos y pasarlos de contrabando a la nueva Constitución. Pero la verdad es que es un esfuerzo vano, claramente la derecha es minoría, el Presidente influye poco en el curso de los acontecimientos. Y los contenidos los definirá realmente la ciudadanía a través de una Convención Constitucional 100% electa”, dijo Maldonado.

Mientras que el timonel de la DC, Fuad Chahin, indicó que “la señal política que parece que da el gobierno es que hoy día está por el Apruebo, tanto es así que quiere influir en el contenido de la discusión que tendrá que darse en la convención constitucional. Sobre el contenido preciso de la propuesta, hay cosas interesantes, por ejemplo, el tema de la participación ciudadana, del principio del desarrollo sustentable, del Estado solidario. Creo que en eso tenemos coincidencias. También es importante que se garantice el derecho a la diversidad, el reconocimiento a nuestros pueblos originarios".

"Pero creo que se queda corto, en los derechos sociales no se garantiza el derecho gratuito y de calidad a la salud y educación. Tampoco se establece que el agua será un bien nacional de uso público”, concluyó.