Cómo se gestó el acuerdo por la reforma tributaria

"Esto es un portonazo". La frase del diputado Pablo Lorenzini (DC) fue dicha a su par y jefe de bancada, Gabriel Ascencio, apenas entró -para sorpresa de los presentes- el Presidente Sebastián Piñera a la reunión que este domingo sostuvieron el gobierno, representantes de la DC y asociaciones gremiales donde se firmó el protocolo de acuerdo por la reforma tributaria.

La irrupción de Piñera, a eso de las 11:20 de la mañana y cuando ya había comenzado la cita en las dependencias del Ministerio de Hacienda, provocó que Lorenzini saliera de la sala de reuniones sin firmar el documento de acuerdo, visiblemente molesto.

Según relatan quienes estaban en la reunión, el presidente de la DC, Fuad Chahin, y Ascencio se encontraban sentados cerca de los ministros de Hacienda, Felipe Larraín, y Segpres, Gonzalo Blumel, pero apenas vieron el ingreso del Mandatario tomaron sus cosas y se sentaron al otro lado de la mesa, justo en uno de los extremos. Una foto con Piñera no estaba en los planes de la DC, señalaron después en privado.

"Quiero agradecer en especial el esfuerzo de Hacienda y la Segpres y el esfuerzo, colaboración y voluntad, de la DC, de Chile Vamos y los gremios pyme. Este acuerdo marca un camino: siempre el camino del diálogo y la buena voluntad es más fecundo y más seguro. Tengo confianza que en los próximos días podremos llegar a un acuerdo equivalente para impulsar la reforma a las pensiones" dijo Piñera, horas antes de comenzar una gira por Palestina, Israel y Japón.

La ajetreada y sorpresiva visita dejó, sin embargo, al protocolo de acuerdo sin las rúbricas de los representantes DC en la comisión de Hacienda de la Cámara: Lorenzini se retiró de la sala y el diputado José Miguel Ortiz reiteró que "no firmará ningún protocolo de acuerdo más hasta no ver las indicaciones. No daré un cheque en blanco".

En tanto, Chahin, consultado por la ausencia de estas firmas y el escenario que se espera con los senadores DC, comentó que el suscrito era un compromiso "institucional" del partido.

"Todos los diputados conocieron el acuerdo, sus puntos están incorporados, por lo tanto es un compromiso institucional que nuestros diputados van a honrar y las indicaciones del gobierno deben reflejar claramente este protocolo", dijo el timonel falangista.

Sin embargo, trascendió que los diputados Raúl Soto, Víctor Torres, Miguel Ángel Calisto y Mario Venegas tendrían dudas en suscribir el acuerdo que alcanzó la mesa de Chahin y el jefe de bancada. "No conozco el acuerdo, no estoy en condiciones de decir hoy si lo apoyo o no", comentó Venegas.

El gobierno, en tanto, tendría los votos necesarios para aprobar el proyecto en la Cámara, el primero en el que alcanza un acuerdo con la DC en una de sus reformas estructurales: se necesita mayoría simple en la Sala (78 votos) y el Ejecutivo contaría con al menos 79 diputados correspondientes a las bancadas oficialistas y diez diputados DC.

Tras la firma del protocolo, además, el Mandatario y los ministros se reunieron con los jefes de bancada del Senado y la Cámara y de la comisión de Hacienda de Chile Vamos.

Durante toda la semana los miembros de la DC y el gobierno aceleraron las gestiones para cerrar un acuerdo que se venía prolongando desde mayo, mes en que se aprobó la idea de legislar. De hecho, el timonel de la DC había formado un grupo de expertos en materia tributaria que lo asesoró durante la discusión en general.

La reintegración era la piedra en el zapato para la DC que finalmente cedió en este punto a cambio de mejoras para las pymes, a las regiones y a las contribuciones de los adultos mayores.

Por su parte, el gobierno había intentado acercar posiciones con Lorenzini y Ortiz: Larraín recibió a los diputados en Teatinos 120 el lunes 17 y lo mismo hizo Blumel al día siguiente en el Congreso. El viernes 21, en tanto, fue el día en que se selló el acuerdo en una reunión entre Chahin, Ascencio, Blumel y el subsecretario Segpres, Claudio Alvarado.

Solo cuando Chahin logró convencer a Lorenzini le notificó al gobierno que su bancada -o la mayoría de ella- aprobaría el proyecto de modernización tributaria.

La duda estará -admiten en el gobierno- con la iniciativa en el Senado.

Reintegración

Se da luz verde a la reintegración y el Ejecutivo se compromete a compensaciones "en forma específica y clara" de a lo menos US$ 400 millones mediante la limitación del market maker; el control de operaciones back to back; los retiros por ISFUT y operaciones extranjeras.

Propyme y Dedecon

Se acuerda ampliar el universo de pymes beneficiadas por un régimen simplificado para empresas con ventas de hasta 75 mil UF anuales, pudiendo entrar y salir del sistema con efecto prorrateado en 10 años. También prevé el fortalecimiento del Defensor de Contribuyente.

Regiones y renta

Se establecerá un aporte de las empresas del 1% de los nuevos proyectos sobre US$10 mills, con externalidades negativas, con distribución de 1/3 por región, municipio y fondo común. También se acotará la definición de gasto del giro para evitar mal uso del mecanismo o uso doloso.

Contribuciones

Se acuerda que el reajuste de las contribuciones para adultos mayores de clase media por reavalúo sea según el avalúo fiscal de la propiedad y no el IPC. Los topes aumentan desde $89 mills hasta un mínimo de $108 mills. Y en e-commerce, se trabajará según lineamientos OCDE (IVA).

Despacho en 30 días

Se establece el compromiso para que el proyecto sea despachado por la Cámara de Diputados dentro de los 30 días siguientes a la firma del texto y se crea una comisión bipartita entre Hacienda y el equipo tributario DC para materializar los acuerdos mediante indicaciones.