Cómo se prepara Piñera para enfrentar al Congreso

El lunes se quedó a dormir en La Moneda, porque se le hizo tarde trabajando, entre otras cosas, en preparar la cuenta pública. El Presidente Sebastián Piñera ha dedicado al menos tres horas al día durante esta semana para alistar el discurso que deberá realizar mañana ante el Congreso, su segunda rendición de cuentas durante esta administración.

En el Ejecutivo dicen que el Mandatario durmió en Palacio para optimizar el tiempo, debido a que el martes partió a primera hora al sur. Ese día se trasladó a Puerto Montt y Concepción, regresó el miércoles en la tarde a Santiago y se fue de inmediato a La Moneda, donde siguió trabajando en el texto de su discurso, mientras que ayer continuó durante toda la mañana haciendo lo mismo, hasta pasadas las 22.30.

Hace tres semanas que el Mandatario comenzó a preparar su alocución, que será la primera en horario prime, a las 20.45, debido a una petición que hizo el propio Ejecutivo al Senado y que, hasta el día de hoy, los mantiene preocupados debido a los efectos que esto tendrá.

Así, para llegar a la cuenta pública con una puesta en escena perfecta, Piñera hace reuniones permanentes con su equipo y corrige constantemente el borrador de discurso que tiene, añadiéndole elementos nuevos o poniendo más énfasis en ciertas palabras. Además, dedica tiempo a ensayar con el teleprompter, con el objetivo de que esté bien ajustado. Esto, para evitar repetir el episodio del año pasado, cuando en plena intervención ante el Congreso ese sistema no avanzaba a una velocidad adecuada y el Mandatario pidió "que avance el teleprompter".

En 2018, su intervención duró dos horas y 17 minutos. Si bien para esta ocasión la apuesta inicial era que se extienda entre 45 minutos y una hora, en el gobierno afirman que lo más probable es que pase los 60 minutos.

El discurso, según han dicho en el Ejecutivo, tendrá tres etapas: un diagnóstico de la situación del país, un balance de lo que han hecho y qué es lo que viene. En esto último es donde se incluirán los principales anuncios.

Las mismas fuentes sostienen que se destacarán los acuerdos nacionales y las reformas emblemáticas (tributaria, previsional, laboral y salud), algo sobre lo que el Jefe de Estado tiene un desafío: aterrizar -según han explicado desde el gobierno- los beneficios que tienen esos proyectos para las personas.

Pese a que hay un equipo especial para escribir los discursos de Piñera, liderado por Jacinto Gorosabel e integrado por Matías Tobar, Sebastián Adasme y Benjamín Trufello, es el propio Mandatario quien diseña la primera estructura y el primer borrador de su alocución.

En La Moneda afirman que el Jefe de Estado fue quien le entregó a Gorosabel un documento con los principales ejes y la línea discursiva. Para eso, recopiló información previa que le pidió a la Segpres, ministerio que se encargó de solicitarles los insumos a cada una de las carteras con sus respectivos avances.

Luego de eso, Gorosabel -sobre la base del borrador que le entregó Piñera- hizo al menos tres propuestas, para lo que contó con la colaboración de las opiniones del jefe del Segundo Piso, Cristián Larroulet; del exministro de las Culturas Mauricio Rojas y de la periodista Fernanda Otero. En el Ejecutivo afirman que el Mandatario "tiene súper claro" lo que quiere y supervisa directamente los avances del escrito.

Este mismo equipo se ha reunido al menos tres veces con Piñera para ir viendo los cambios del texto original que hizo el Jefe de Estado, sobre el cual se han ido haciendo modificaciones. Además, mantienen contacto vía correo electrónico para ir incorporando algunas precisiones.

Hasta el año pasado, la jornada de la cuenta pública partía a primera hora de la mañana con la fotografía oficial de ministros y subsecretarios en el palacio presidencial de Cerro Castillo y finalizaba con un almuerzo ofrecido por el o la jefa de Estado en el mismo lugar, después del discurso. Este año, pese al cambio de horario, se mantendrá un esquema similar, aunque todo comenzará más tarde.

Así, a partir de las 18.00 llegarán ministros y subsecretarios para la fotografía oficial con el Mandatario. Luego, desde las 19.15 está contemplada la salida hacia el Congreso de las autoridades. La llegada del Mandatario al edificio porteño está contemplada para las 20.20, 10 minutos antes de que se dé inicio a la sesión. Y para ese día el Presidente cuenta con 65 invitaciones que le entrega el Senado. De esas -junto con convocar a Guarequena Gutiérrez, la representante del presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó-, invitó a su familia, entre ellos, a sus hijos, quienes se espera asistan al encuentro, a excepción de Sebastián, quien está fuera de Chile. También, según dicen en Presidencia, Piñera extendió invitaciones a gremios y colaboradores del gobierno.

Una vez concluido el discurso, Piñera y la primera dama, Cecilia Morel, ofrecerán una recepción en Cerro Castillo para ministros, subsecretarios e invitados.