UDI busca condicionar aportes fiscales a mínimo de 10% de participación

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La iniciativa será ingresada en marzo por María José Hoffmann, Jorge Alessandri y Juan Antonio Coloma.

Diputados ingresarán proyecto para que financiamiento público a los partidos políticos considere un piso de votantes en elecciones internas.


La primera semana de marzo, cuando se retome el trabajo legislativo tras el receso de febrero, los diputados UDI María José Hoffmann, Jorge Alessandri y Juan Antonio Coloma ingresarán un proyecto de ley que condiciona la entrega de recursos públicos a los partidos políticos a un piso mínimo de participación en sus elecciones internas.

En la actualidad, las colectividades reciben fondos por parte del Estado en virtud de la votación que obtuvieron en las últimas elecciones de diputados, pero tras la baja participación que hubo en la definición de la nueva mesa directiva de Revolución Democrática -que congregó a cerca del 8% de su militancia-, los parlamentarios gremialistas consideraron necesario incorporar como requisito para contar con dineros públicos la participación de un mínimo de 10% del padrón de militantes o adherentes habilitados para votar en ese tipo de instancias, con el fin de asegurar "un nivel mínimo de legitimidad y representación" por parte de sus autoridades.

En el texto -al que accedió La Tercera-, los parlamentarios aluden a la situación de RD y exponen que los niveles de convocatoria obtenidos por la tienda "nos permiten dudar sobre el nivel de representación real que alcanza dicho partido y, especialmente, sobre la legitimidad con la que actúan sus autoridades".

Según explicó Alessandri, "no parece razonable que a un partido político que no alcanza una convocatoria de su padrón electoral de a lo menos un 10% para el ejercicio de la democracia interna, el Estado tenga que seguir financiándolo con aportes de todos los chilenos". Y añadió: "Chile debe fortalecer su democracia y no financiar espejismos".

Bajo esa lógica, la iniciativa modifica la Ley Orgánica Constitucional de Partidos, estableciendo un piso mínimo de votación y, en caso de no llegar al 10%, "la elección deberá repetirse por segunda vez, dentro de los 60 días siguientes". Repetido el proceso electoral, si nuevamente la colectividad no alcanza el mínimo de participación, el proyecto estipula que "el partido quedará inhabilitado para recibir aportes y financiamiento estatal". El plazo durante el que una tienda quedaría inhabilitada para obtener recursos estatales es algo que los parlamentarios buscarán definir en la tramitación del proyecto en el Congreso.

Tal medida, no obstante, podría ser apelada por la colectividad al Servicio Electoral en un plazo de 15 días. Y el organismo, "considerando el mérito de lo expuesto, podrá habilitar al partido para percibir aportes y financiamiento estatal, o parte de este".

Para Coloma, la necesidad de una norma de estas características radica en que "ser electos con una participación inferior al 10% parece extremadamente poco para darle legitimidad a un proceso democrático", y da cuenta de un partido que "si bien tiene liderazgos potentes, no tiene estructura a nivel país".

En esta misma línea, la diputada Hoffmann dijo que lo ocurrido el fin de semana muestra que "hay un divorcio absoluto entre la dirigencia de RD y las bases; no han sido capaces de articular un discurso que cautive a sus militantes para que se involucren en los procesos internos del partido".

"Cuando se habla de democracia, no solo cuentan las protestas; los partidos se hacen ejerciendo la democracia interna de manera adecuada y convocante", finalizó.

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