La junta de acreedores del Complejo Manufacturero de Equipos Telefónicos (CMET) aprobó un acuerdo de reorganización judicial ante el 7° Juzgado Civil de Santiago.

CMET es una empresa de capitales chilenos fundada en 1978, con más de 40 años de experiencia en el mercado de las Telecomunicaciones, entregando a más de 25 mil hogares y empresas servicios de internet, telefonía y televisión por cable. El convenio permite a la empresa, controlada por la familia Barra Yates, la continuidad de giro de la firma del rubro de telecomunicaciones.

El acuerdo consiste en la venta ordenada, por parte del interventor de bienes inmuebles que son de propiedad de CMET. Adicionalmente, los acreedores buscan terminar con los contratos de leasing sobre inmuebles, dar en parte de pago inmuebles de propiedad deudora al Banco Itaú Corpbanca, y poner término al contrato de leasing sobre bienes muebles.

Los efectos de la pandemia, cambios en el mercado y otros factores, llevaron a la empresa a enfrentar a una situación de alta dificultad para cumplir con el pago de los pasivos con acreedores bancarios y también con proveedores y trabajadores.

En el marco de la reestructuración de sus operaciones para asegurar la continuidad de la empresa, ésta se vio obligada a efectuar una drástica disminución de su personal, que alcanzó aproximadamente al 50%, en el mes de octubre del año 2021, lo que generó cuantiosos pasivos con sus excolaboradores.

La operación fue conducida por el abogado Mario Mora Nieto, quien tuvo a su cargo la negociación que permitió alcanzar los acuerdo con la banca y demás acreedores, contando también con la colaboración en la tramitación del expediente de reorganización, con el abogado Álvaro Parra.

”Estamos muy satisfechos de haber podido sacar adelante la propuesta que realizamos a nuestros acreedores, que permitirá que la empresa continue con el desarrollo de sus operaciones, preservando la fuente laboral de los colaboradores que permanecen en ella, y resolviendo los pasivos con todos sus acreedores en un cien por ciento. En relación con los extrabajadores, el acuerdo constituye un hito importante, en cuanto es la primera vez que en un proceso de reorganización judicial, los trabajadores participaron activamente, votaron y fueron parte del acuerdo alcanzado con la empresa”, sostuvo Mora.

El abogado expresó, asimismo, su reconocimiento a la disposición mostrada por Banco Itaú Corpbanca que, finalmente, accedió a reducir parte de sus acreencias en contra de CMET y liberar garantías hipotecarias constituidas en su favor, lo que permitirá la enajenación de dichos inmuebles para solventar el pago de los créditos laborales.

La empresa deudora se comprometió a pagar a los ex trabajadores $1.043.984.031.

En el caso del acreedor Telefónica Chile S.A., las acreencias verificadas se extinguirán compensándose entre las partes el monto de las obligaciones recíprocas existentes a la fecha

Según detalló en su presentación, en el año 2019 CMET se ve fuertemente impactada por el estallido social y posteriormente la pandemia, situación que afectó no solo a los hogares en Chile desde el punto de vista económico, sino también al área pública, haciendo muy difícil sostenerse mes a mes sin contar con los flujos de pagos por parte de los clientes.

En el transcurso de la pandemia, la autoridad levantó distintos mecanismos de ayuda a la población a lo que en tecnología se refiere, una de ellas fue entregar sin costo internet a los hogares que demostraban no contar con ingresos en este período, medidas que, sin lugar a duda beneficiaron a la población, no obstante, nuestra empresa se vio perjudicada.

Esto llevó a CMET a sufrir un grave problema de liquidez, lo que hizo imposible efectuar las inversiones en el momento oportuno en la tecnología necesaria para hacer frente no solo a la deuda bancaria, sino también al pago de los proveedores.

A razón de estos hechos, la Eempresa ha levantado medidas administrativas y financieras correctivas a su interior, como también nuevas pautas comerciales, las cuales pueden garantizar en un mediano plazo que esta Reorganización de sus frutos. Así mismo, en este plan de reestructuración la administración de la empresa ha estimado esencial enajenar activos inmobiliarios para propender el pago de los pasivos y así asegurar la continuación del giro.