Algunos estados de Estados Unidos alegan que Google engañó a los usuarios sobre el seguimiento de la ubicación
La unidad de Alphabet es acusada de registrar la ubicación de los usuarios incluso después de que estos intentaran desactivar el seguimiento.
Google de Alphabet Inc. engañó a los consumidores al registrar su ubicación incluso después de que los usuarios intentaron desactivar el seguimiento de la compañía en sus smartphones y navegadores web, según demandas presentadas por Washington, D.C. y otros tres Estados.
Google les dijo falsamente a los clientes que si optaban por no recopilar su “Historial de ubicación” u otras configuraciones, Google no almacenaría los lugares a los que fueran, según una de las demandas, presentada el lunes en el Tribunal Superior del Distrito de Columbia por el Fiscal General, Karl Racine, del D.C. (District of Columbia).
De hecho, dice la demanda, Google sigue rastreando los movimientos de las personas utilizando información de su motor de búsqueda, la aplicación Maps, los servicios Wi-Fi y Bluetooth.
“En realidad, independientemente de la configuración que seleccionen, los consumidores que usan los productos de Google no tienen otra opción que permitir que la Compañía recopile, almacene y use su ubicación”, afirma la demanda. “En pocas palabras, incluso cuando el dispositivo móvil de un usuario está configurado para denegar el acceso de Google a los datos de ubicación, la empresa encuentra una forma de seguir determinando la ubicación del usuario”.
Se estaban presentando demandas similares en los tribunales Estatales de Indiana, Texas y Washington, según los fiscales generales de esos Estados.
Google rechazó las acusaciones.
“Los fiscales generales están presentando un caso basado en afirmaciones inexactas y obsoletas sobre nuestra configuración”, afirmó el vocero de Google, José Castañeda. “Siempre hemos integrado funciones de privacidad en nuestros productos y brindado sólidos controles para los datos de ubicación. Nos defenderemos enérgicamente y dejaremos las cosas claras”.
Castañeda dijo que Google ha realizado cambios en los últimos años para mejorar la privacidad, como facilitar el acceso a la configuración de la ubicación y estimar la ubicación general de una persona cuando realiza una búsqueda, en vez de señalar una ubicación precisa.
La demanda de Washington, D.C. busca multas contra Google, así como la devolución de datos obtenidos gracias a cualquier conducta ilegal y “cualquier algoritmo desarrollado en base a usar dichos datos”.
La demanda afirma que Google rastrea la ubicación de las personas en todos los smartphones, incluidos los iPhone de Apple Inc. con sistemas operativos iOS y dispositivos de fabricantes como Samsung Electronics Co. que dependen del sistema operativo Android de Google.
Los datos de ubicación son recopilados por Google Search, Google Maps, YouTube y otros servicios, dice el documento, incluso cuando la ubicación de un usuario no es necesaria para respaldar la funcionalidad del servicio.
Para respaldar sus afirmaciones, la demanda cita documentos internos de la empresa, incluido uno en el que un empleado de Google supuestamente dice que la interfaz de usuario para la configuración de la cuenta de Google “parece que está diseñada para hacer que las cosas sean posibles, pero lo suficientemente difíciles como para que la gente no sea capaz de resolverlo”.
Las demandas llegan en un momento en que los legisladores y reguladores en Washington están evaluando propuestas para imponer amplias protecciones de privacidad online luego de años de quejas de grupos de defensa de la privacidad, quienes dicen que las protecciones legales actuales para los consumidores no son suficientes.
Algunas empresas rivales también han afirmado que es casi imposible competir con los gigantes tecnológicos debido a su capacidad, en gran medida ilimitada, para recopilar datos de geolocalización de los usuarios.
Las nuevas demandas “ayudarán a motivar aún más a los reguladores de la (Comisión Federal de Comercio (o FTC por sus siglas en inglés)) para controlar este tipo de prácticas que se están volviendo cada vez más fuertes”, afirmó Jeff Chester, director ejecutivo del Centro para la Democracia Digital, una organización sin fines de lucro que aboga por la privacidad y la protección del consumidor online.
Los líderes de la FTC, incluida la presidenta Lina Khan, saben que la comisión “permitió que este problema, esta pesadilla, creciera, porque la comisión no ha hecho nada con respecto al modelo de negocio”, afirmó Chester.
La FTC está sopesando nuevas reglas de privacidad online, que podrían estar dirigidas a las prácticas de recopilación de datos de Google y otras big tech.
Los miembros del Congreso también están considerando una legislación sobre la privacidad, que ha ganado el apoyo bipartidista, sobre todo en lo que respecta a sumar protecciones para los niños.
Aun así, existen importantes obstáculos políticos para la legislación sobre privacidad, entre ellos, la gran complejidad de la regulación, así como el creciente número de leyes Estatales de privacidad, incluida la de California, que podrían entrar en conflicto con un estándar federal.
La inacción del Congreso sobre una ley federal de privacidad subrayó la importancia de la demanda del lunes, afirmó Racine.
“Sabemos, lamentablemente, que el Congreso probablemente no podrá regular, legislar en torno a estas difíciles cuestiones. Están paralizados”, sentenció.
Sin embargo, algunos defensores de la privacidad dicen que es posible que los tribunales tampoco ofrezcan un camino fácil.
“Sin una ley nacional e integral de protección de datos, los tribunales han dificultado la presentación de reclamos como este ya que las empresas pueden remitirse a señalar divulgaciones de políticas de privacidad”, afirmó Jules Polonetsky, director ejecutivo de Future of Privacy Forum, un grupo respaldado por empresas.
Google está luchando por separado contra tres demandas antimonopolio de Estados Unidos, dos vienen de grupos de estados y una del Departamento de Justicia, alegando conducta anticompetitiva relacionada con sus negocios de publicidad y búsqueda. La compañía ha negado las acusaciones en esas demandas y recientemente se movió para desestimar la demanda en Texas y otros Estados que apuntan a sus prácticas de publicidad digital.
En mayo del 2020, el fiscal general de Arizona demandó a la empresa en un tribunal Estatal por acusaciones relacionadas con el seguimiento de la ubicación que son similares a las que se ven en las demandas anunciadas el lunes. El caso está pendiente.
Las demandas relacionadas con el seguimiento de la ubicación citan de manera destacada un artículo de Associated Press del 2018 que informó que las prácticas de Google eran inconsistentes con sus declaraciones a los usuarios.
Generalmente, las leyes de protección al consumidor de Estados Unidos establecen que es ilegal que las empresas participen en actos o prácticas injustas o engañosas.
—Tripp Mickle contribuyó a este artículo.
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