¿Apruebo o Rechazo?: Santander ve que incertidumbre seguirá gane quien gane

Entre $100 y $150 por sobre sus fundamentales. Es es el precio que el mercado estaría exigiendo al tipo de cambio hoy ($849,95) por los riesgos políticos, aunque la falta de previsibilidad del escenario económico no necesariamente se agotaría tras el plebiscito de salida de la propuesta de nueva Constitución elaborada por la Convención Constitucional. Y con ello, los precios de los activos no necesariamente volverían a la “normalidad”.

Esa es la visión de Claudio Soto, economista jefe de Banco Santander, quien en la mañana de este martes se refirió al proceso constitucional en el marco de la presentación del “Panorama Económico Mensual” que hace la entidad bancaria.

Según Soto, “el texto constitucional propone cambios bastantes drásticos en una serie de ámbitos que inciden en diversos aspectos, tanto la organización del Estado como en la organización económica del país. Las normas transitorias serán muy importantes para ver cual será la gradualidad con que eventualmente se implementan estos cambios”.

Sin embargo, la incertidumbre no se acabaría tras el triunfo de algunas de las dos opciones, advirtió. “En la medida que tengamos esta discusión abierta (reforma constitucional), todavía obviamente hay un marco de incertidumbre que tiene impactos económicos relevantes. En el caso del plebiscito de salida pensamos que cualquiera de las dos opciones que termine dándose, va a implicar que vamos a mantener grados de incertidumbre importantes. En el caso del Apruebo, porque será necesario implementar lo que está escrito en la Constitución, y eso implica cambios normativos sustantivos en los próximos años. Y en el caso de ganar el Rechazo, es probable que el proceso constituyente no se cierre ahí, que siga abierto a través de distintos mecanismos”

Con esto, esa discusión ya empezaría a mostrar efectos en la inversión. Según Soto, ”hacia adelante, la inversión no va a tener un impulso muy significativo. Por un lado tenemos el estrechamiento de las condiciones financieras, que encarece los costos de los proyectos, por otro lado tenemos la incertidumbre vinculada al proceso político interno, que dificulta avanzar con proyectos. Lo que se está discutiendo en el texto constitucional son cambios bastante profundos en el ordenamiento jurídico que tiene incidencia en muchos sectores, y por lo tanto, hasta que no haya mayor calidad de las reglas del juego, es difícil que veamos un flujo de proyectos muy importante”.

Consultado sobre los efectos económicos si es que gana el Rechazo, Soto contestó que “los precios financieros capturan eventos políticos, por lo tanto sí van a ser afectados por los resultados del plebiscito. Lo que es más difícil saber es cuánto de los precios hoy están incorporando alguna de las dos opciones, y además, aún cuando gane una u otra alternativa, el marco de incertidumbre va a seguir presente, por lo tanto es probable que no veamos correcciones tan significativas en una u otra dirección. Es probable que los precios ya tengan incorporado que ninguna de las dos opciones va a tener un resultado muy holgado”.

Respecto de los desafíos fiscales que traerían los derechos establecidos en el borrador de la Constitución, Soto señaló que se “innova bastante en la institucionalidad fiscal, pues no habrá iniciativa exclusiva del Presidente en materia de gastos, sino que habrá una concurrencia entre el Congreso y el Presidente”, y que “se abre la posibilidad de que los gobiernos locales y regionales puedan emitir deuda”. Pero, apuntó, por otro lado, el texto “incluyó el principio de responsabilidad fiscal. Es difícil juzgar cómo ese principio va a entrar a conversar con los otros principios que establece la Constitución, probablemente vamos a tener fuerzas contrapuestas”.