Justo en el tiempo límite. Este miércoles los trabajadores del sindicato número tres de Consalud, que agrupa a 881 trabajadores administrativos, llegaron a acuerdo en la negociación colectiva que hicieron con la isapre.

Las conversaciones se extendieron por varias semanas, y los trabajadores evaluaron iniciar una huelga legal, pero finalmente llegaron a consenso. La empresa presentó una oferta este martes, donde propuso un bono de término de conflicto de $650 mil para todos los trabajadores que llevan más de seis meses en la empresa, y un bono de $325 mil para quienes llevan menos de ese tiempo.

También acordaron alzas salariales de entre $13 mil y $46 mil según tramo de sueldo base, más reajuste de IPC en enero (por seis meses) de 2,5%. Asimismo, acordaron la posibilidad de acceder a un préstamo blando de $350 mil para los trabajadores que lleven más de seis meses en la isapre.

Los trabajadores aceptaron dicha oferta este miércoles, con 605 votos a favor, correspondiente al 71,01% de los votantes. En tanto, hubo 235 votos por rechazar la oferta, esto es un 27,98% del total. También se registraron siete votos blancos y cinco nulos. De esta manera, los trabajadores administrativos dieron por finalizada la negociación colectiva. Eso sí, el sindicato que agrupa a los trabajadores de ventas sigue negociando con la compañía.

La negociación no fue fácil. Hace un par de semanas los trabajadores del sindicato número tres habían aprobado la huelga dado que no llegaron a acuerdo en la primera etapa de la negociación colectiva con la empresa. Luego, iniciaron la mediación obligatoria ante la Dirección del Trabajo (DT), donde tampoco hubo acuerdo en esos cinco días hábiles que duró.

Terminado ese plazo, ambas partes acordaron una prórroga hasta este miércoles, para ver si lograban llegar a un punto de encuentro. De no haber habido acuerdo en ese plazo, u otra prórroga, los trabajadores podrían haber empezado la huelga este jueves. Pero la empresa finalmente presentó una oferta mejorada este martes, y los trabajadores le dieron el visto bueno este miércoles, llegando así a acuerdo.

Tras ser consultados sobre el asunto, desde Consalud señalaron que “este acuerdo con el sindicato implicó un gran esfuerzo económico por parte de la compañía y se hizo para evitar una huelga que habría llevado a una detención de los servicios a los afiliados, causándoles un enorme perjuicio. Todos en Consalud estamos comprometidos con nuestros afiliados y trabajamos con la esperanza de una pronta solución a la crisis que han generado los fallos de la Corte Suprema. Esperamos que el Gobierno tome las medidas necesarias para que no se vean afectados los afiliados ni trabajadores”.

Es que precisamente estas negociaciones con el sindicato se dan en un contexto en que las isapres acusan estar pasando por su peor momento, en un contexto en que tienen que aplicar dos fallos de la Corte Suprema, que a su juicio, hacen inviable la sostenibilidad del sector de no mediar alguna medida legislativa. Por eso se está tramitando actualmente la ley corta de isapres en el Congreso, aunque según lo que ha propuesto el gobierno hasta ahora, a juicio de la industria, sería una medida insuficiente.

Las isapres registraron poco más de dos años con pérdidas consecutivas en todos los trimestres, entre enero de 2021 y marzo de este año. Pero después de nueve trimestres seguidos de mermas, en los tres meses terminados en junio de este año consiguieron ganancias por primera vez. Y ahora, al cierre de septiembre, nuevamente lograron números azules, acumulando $13.154 millones en lo que va del año, sin considerar a isapre Esencial.

Estas utilidades que acumulan las isapres a septiembre equivale al 4,6% de las pérdidas sumadas que tuvieron al cierre de los últimos dos años ($284 mil millones), y ocurre principalmente por los mayores ingresos que consiguieron tras el alza del precio GES que hicieron las aseguradoras en octubre del año pasado. Sin embargo, eso debería cambiar pronto dado el fallo de la Corte Suprema que anuló dicho incremento, rebajas que las isapres empezaron a aplicar este mes. Ahora, desde la industria estiman que desde enero volverán a las pérdidas, sin saber a ciencia cierta cuándo podrán salir de los números rojos.

Sin ir más lejos, si el fallo GES hubiese estado en marcha al primer semestre, todas las isapres tendrían mermas. El caso más extremo es precisamente el de Consalud, ya que fue la isapre que más había subido su prima GES en el último proceso: a junio la isapre registró una ganancia mensual antes de impuestos cercana a $2.170 millones, pero si se hubiera aplicado el fallo GES, habría tenido una pérdida mensual de $14.505 millones.

Lo anterior, considerando que el regulador calculó que el impacto del fallo GES en Consalud sería de menores ingresos por 25,8%, por lo que sus ingresos mensuales por cotizaciones habrían pasado desde los $64.630 millones mensuales que obtuvo realmente, a $47.956 millones en el primer semestre, lo que no le habría alcanzado para cubrir los costos en licencias médicas y prestaciones de salud que tuvieron sus afiliados por $57.021 millones mensuales promedio en ese período. A eso, además, hay que restar los gastos de administración por $6.550 millones que tuvo la isapres, e incorporando otros ítems de ingresos y egresos es que se obtiene el nivel de pérdidas antes mencionado.