Las empresas industriales de Europa advierten sobre los costos energéticos
Una importante fundición de aluminio en Dunkerque ha reducido la producción, mientras que las operaciones de zinc en el norte de Francia planean cerrar en respuesta a los altos precios de la energía.
Las acererías, los fabricantes de vidrio y otras empresas europeas que necesitan mucha energía están pidiendo a los gobiernos que tomen medidas para evitar que los precios récord del gas y la electricidad obstaculicen la economía de la región.
Los precios del gas natural en Europa volvieron a dispararse a máximos históricos esta semana después de que los flujos de Rusia, el principal proveedor del continente, cayeran justo cuando el clima frío impulsó la demanda y Électricité de France SA tomó medidas para apagar una planta de energía nuclear por razones de seguridad. Las medidas convirtieron al continente en el mercado de gas más caliente del mundo, lo que provocó que los barcos que transportaban gas estadounidense frío a Asia cambiaran de rumbo y se dirigieran a Europa, donde podrían sacar más dinero por sus cargamentos.
La flotilla de barcos cisterna ayudó a enfriar los precios del gas al final de la semana. Incluso después de la caída del viernes, los futuros de referencia del gas holandés seguían siendo más de seis veces más altos que hace un año a €110 (US$ 124,71) el megawatt por hora. Los precios al por mayor de la electricidad también se han disparado en todo el continente.
El aumento de los precios de la energía llevó a la fundición de aluminio más grande de Europa, Aluminium Dunkerque, a cerrar alrededor del 3,7% de su producción a principios de diciembre, afirmó la compañía. Un representante de la empresa se negó a comentar si los continuos aumentos podrían conducir a más recortes.
Mientras tanto, las operaciones de zinc dirigidas por Nyrstar, en el norte de Francia, tienen agendado cerrar por mantenimiento en enero. La empresa de metales, propiedad del comerciante de materias primas Trafigura Group Pte. Ltd., dijo que tomó la decisión porque parece que los precios de la energía en Francia van a estar altos y volátiles para principios de 2022.
Los ejecutivos de empresas industriales en Francia dijeron que no deberían pagar por la electricidad a precios que reflejen la escasez de gas natural porque, a diferencia de Alemania o el Reino Unido, Francia obtiene la mayor parte de su electricidad de plantas de energía nuclear. Las empresas en España se encuentran en un dilema particular porque los contratos de energía a precio fijo son menos comunes que en Francia o Alemania, exponiéndolos a los precios del mercado spot (mercado donde instrumentos financieros, monedas o productos básicos son comerciados para su entrega inmediata).
Los precios de la energía en Europa subieron por primera vez a principios del otoño. Las empresas que necesitan suministros listos de gas y energía han podido pasar la factura a los clientes, acelerando el ritmo de la inflación en el Reino Unido y la eurozona. Pero los casos aislados de disrupción proliferarán si los precios se mantienen en niveles históricamente altos y las autoridades no amortiguan el golpe, según grupos que representan a las empresas.
“La situación actual ha afectado gravemente la competitividad y la rentabilidad de los sectores que hacen uso intensivo de la energía”, afirmó un grupo de asociaciones que representan a las industrias europeas del vidrio, el acero, el cemento y otras industrias en un comunicado el miércoles. “Un período prolongado de precios de la energía insoportablemente altos podría provocar graves pérdidas”.
Las asociaciones pidieron a los gobiernos nacionales que implementen herramientas que la Unión Europea ha dicho que los Estados miembros pueden usar para mitigar el impacto del aumento de precios. Por ejemplo, la UE dijo en octubre que los gobiernos podrían reducir los impuestos o gravámenes sobre el gas y la energía sin violar las reglas del bloque sobre ayudas estatales si todos los consumidores de energía se benefician.
Los precios de los permisos de emisiones de carbono, que las empresas de servicios públicos y otros emisores deben poseer bajo el esquema de comercio de emisiones de la UE también se dispararon este año. En su comunicado del miércoles, las asociaciones de la industria dijeron que el mercado debería cambiarse para evitar saltos repentinos en los precios de la energía y evitar que las empresas trasladen operaciones intensivas en carbono fuera del bloque.
Un vocero del organismo ejecutivo de la UE dijo que estaba siguiendo de cerca el aumento de los precios de la energía.
La producción de zinc —material que se utiliza en la construcción, los autos y bienes como lavadoras— se encuentra entre las industrias más expuestas a la escasez de energía. Los recortes de producción ya han elevado los precios del metal y los analistas de Citigroup esperan que muchas otras fundiciones de zinc sigan a la planta de Nyrstar en Auby, y reduzcan su producción o la cierren por completo.
Otra industria que está sintiendo los golpes es el sector de servicios públicos en el Reino Unido.
El gobierno británico pone límites a los precios que los proveedores de energía pueden cobrar a los consumidores, lo que significa que cualquier gas o energía que compren en el mercado al contado (o mercado spot) cuesta, actualmente, más de lo que pueden ganar. Veintiocho proveedores de más de 4,2 millones de hogares han quebrado este año, según el regulador Ofgem, que exigirá que los proveedores se sometan a pruebas de estrés financiero a partir de enero para evitar una repetición.
El costo de trasladar a los clientes a proveedores sobrevivientes, incluidos EDF y subsidiarias de Centrica PLC y Royal Dutch Shell PLC, está aumentando. Los documentos publicados por Ofgem esta semana mostraron que el regulador había aprobado £1.800 millones (de libras esterlinas), equivalentes a US$ 2.410 millones, en pagos para cubrir los costos de suministro de energía a los clientes de empresas en quiebra.
La ley no incluye los costos involucrados en mantener el flujo de energía hacia los 1,6 millones de clientes de Bulb Energy, el mayor proveedor quebrado. Los administradores designados por el tribunal dirigen la empresa porque tenía demasiados clientes para trasladarlos rápidamente a otras empresas de energía.
Se espera que las facturas de energía para los consumidores del Reino Unido aumenten en abril, cuando los analistas de Investec dicen que es probable que el precio máximo aumente a £2.000 desde las £1.277 actuales. El banco estima que el aumento, que refleja el alza de los precios en el mercado mayorista, agregará 1,8 puntos porcentuales a la inflación de los precios al consumidor en el Reino Unido.
“La industria (energética) nunca ha estado tan vulnerable como ahora”, sentenció Audrey Gallacher, directora ejecutiva adjunta y directora de comercio minorista de Energy U.K., un grupo industrial.
—Jon Sindreu contribuyó a este artículo.
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