El presidente y CEO de G&N Brands, Atila Noronha tiene varios motivos para estar contento por estos días. El ejecutivo brasileño a cargo de la operación del holding en Chile y México cuenta -en conversación con Pulso- que al cierre del primer semestre el conglomerado registró ventas históricas, por la transformación digital y su expansión internacional.

A finales de noviembre de 2022, el holding de comida rápida -propiedad del fondo estadounidense Carlyle- que opera las marcas Doggis, Juan Maestro, Mamut, Tommy Beans, Lovdo Pizza, Barrio Chik’en y Bloke Burger mantenía ventas anuales por US$135 millones y generaba en total 8.000 empleos.

Hoy, esas cifras quedaron en el pasado y G&N Brands proyecta cerrar 2023 con ventas en torno a los US$170 millones, generando unos 10.000 puestos de trabajo en Chile y México.

“Nosotros estamos arriba y despegamos del rubro. En el acumulado a julio crecimos nuestras ventas 15,6%. Estamos muy agradecidos de nuestros clientes, franquiciados y colaboradores. Mis personas aún no lo creen. Las ventas del mes de julio fueron las más altas en la historia de G&N”, añadió.

Noronha explicó que no han parado de crecer y en momentos en que se realiza esta entrevista, la compañía estaba abriendo un nuevo local de Juan Maestro en Talca. Anteriormente, el holding gastronómico había abierto locales de Doggis y Barrio Chick’en en otras ciudades. “No hay una concentración importante en marcas”, dijo.

Explica que la pandemia provocó un profundo ajuste en la operación del grupo, cuyos locales principalmente se ubican en los patios de comida de centros comerciales. Hoy cada una de las siete marcas cuenta con una aplicación móvil que le ha permitido al grupo elevar sus cifras en ventas. En esa línea, el ejecutivo destaca que el canal digital representa el 15% de las ventas totales, pero el objetivo es seguir creciendo en este camino.

A modo de ejemplo, Noronha cuenta que en China existen cadenas de comida rápida cuyas ventas sólo por esta vía representan el 90% de sus ingresos. Si antes las aplicaciones funcionaban prácticamente como una cuponera, donde se premiaba a los clientes con descuentos, ahora la idea que toma fuerza, y han puesto en ejecución, es que el usuario pueda comprar directamente al local cercano. De hecho, las plataformas no sólo son un portal de relacionamiento que tiene la marca con el cliente, sino que apunta a ser una herramienta que permita facilitar la compra de sus usuarios. Bajo esa lógica también operan bajo el sistema click and collect, lo que permite que el cliente pueda “saltarse la fila”, dice el ejecutivo presente en Chile desde septiembre de 2018.

La internacionalización de G&N Brands se dio con la apertura de un Doggis y un Barrio Chick’en en el terminal de buses de Querétaro, cuyo flujo estimado es de 30 mil a 35 mil pasajeros y visitantes promedio por cada día. Este terminal de buses es uno de los tres más importantes de México.

Al primer semestre de 2023 ya sumaba cinco locales de Doggis y Barrio Chick’en en dos grandes ciudades mexicanas: Querétaro y León. Las proyecciones para finales de año son duplicar la cantidad de tiendas, sumando eventualmente Guadalajara.

A la fecha, la Fiscalía Nacional Económica (FNE) mantiene en curso una investigación por eventuales restricciones verticales y acuerdos de exclusividad en contra de las aplicaciones móviles de reparto de comida.

Consultado el presidente y CEO de G&N Brands, Atila Noronha sobre los contactos comerciales que mantiene con las aplicaciones de delivery, el ejecutivo calificó “una relación muy saludable” el trabajo realizado con Rappi, Pedidos Ya y Uber Eats. “El repartidor es nuestro representante ante el cliente. No es parte de Pedidos Ya o Uber, él es parte de mi compañía. Él es parte de la experiencia. Siempre ponemos sobre la mesa el interés común de ambas partes. Siempre hablamos de todo”, destacó.

El holding gastronómico recibió el año 2022 el Sartén de Oro, premio que otorga Uber a sus clientes más destacados en ventas. “El Mejor Restaurante Virtual”, consignó la leyenda del premio.

“Ellos tienen condiciones justas. Cada uno tiene una negociación independiente. A veces un agregador decide invertir en una empresa pequeña y dar un precio mejor. Nosotros tenemos un valor que preferimos tener en sigilo, porque son uno a uno, pero son negociaciones que son beneficiosas para ambas partes”, concluyó.