Los dueños de las cadenas Santa Brasa, Pescados Capitales, Juicy Lucy, entre otros, tuvieron un complejo 2022, al menos en nuestro país. El gerente general y socio del grupo gastronómico Civitano, Juan Carlos Verme, cuenta que la inflación, la devaluación del peso chileno y el encarecimiento de las importaciones de carne americana afectaron las ventas en Chile, y que, por lo mismo, para este 2023 planean una serie de reconversiones y reinauguraciones de locales, sumado a una inyección de recursos para marketing, con el fin de atraer más consumidores. Así, ya para 2024, volver a adquirir más cadenas de restaurantes.

Civitano es un grupo gastronómico peruano con presencia en Chile que se dedica a adquirir y operar restaurantes y que se formó en 2015. Sus cuatro principales marcas en nuestro país son La Nacional, Juicy Lucy, Pescados Capitales y Santa Brasa.

Los principales rubros en los que están presentes son hamburguesas, comida marina, comida peruana y carnes. Como tesis de negocio, el grupo se dedica a adquirir restaurantes que tengan potencial de internacionalizarse y que sean marcas reconocidas por los consumidores.

En marzo del 2017 se sumó a la compañía el grupo Wiese, una familia peruana que está en su tercera generación y se dedica a hacer negocios en Perú hace cerca de 90 años. Junto a ellos se ha logrado el principal crecimiento del grupo, cuenta Verme.

En el 2022, cuenta el ejecutivo, Perú y Chile fueron dos mercados que se comportaron completamente distintos, en términos económicos.

Una diferencia fue la inflación: en Perú el año pasado fue la mitad de la que se registró en Chile, mientras que otra diferencia es que “hemos tenido una apreciación del tipo de cambio, que empezó más caro en el año y terminó más barato en Perú. En Chile pasa lo contrario, ha tenido una inflación súper fuerte y ha tenido también una devaluación importante”, agrega.

Ese efecto inflacionaria los afectó en el consumo. “Los chilenos en general por ese efecto tienen menos dinero y, por lo tanto, obviamente tienen menos plata para ir a restaurantes. Y además también las rentas que nosotros pagamos en Chile están en UF y han crecido bastante. Entonces ahí hemos tenido un primer impacto”.

El segundo impacto que sintió la empresa es porque la gran parte de la carne es importada y el grueso viene de Estados Unido. El ejecutivo destaca que la carne americana sufrió una importante alza de precio durante la pandemia, situación que en 2022 los precios no se alcanzaron a recuperar.

Distinto fue el caso de Perú, en donde la firma no enfrentó escenarios tan complejos como en nuestro país, cuenta el ejecutivo. “Perú viene muy bien, a pesar del escenario político, y Chile viene mucho más débil”.

Pese a lo anterior, Verme asegura que hay algo que sí le ha llamado la atención en Chile y es que ha visto un aumento en la competencia de restaurantes en Santiago, cosa que no se ha dado en Lima-. De hecho, en esta última ciudad la apertura de restaurantes nuevos ha sido baja.

De acuerdo a Verme, y en línea con lo que se espera para este 2023, el consumo de los chilenos estará más débil. Sin embargo, contempla ciertos elementos que serían de ayuda para el desempeño del grupo en el país.

“Por ejemplo, la inflación claramente viene a la baja y por tanto, va a tener un menor impacto este año. Además, el precio de la carne americana está volviendo a sus niveles prepandemia y el tipo de cambio ya está hoy día por debajo de los $850. Entonces sí vemos que algunas cosas que nos afectaron el año pasado, este año no se van a dar”, explica.

Con todo, para este año, el ejecutivo comenta que no está en carpeta la adquisición de nuevas marcas, sino más bien un trabajo de reconversión y remodelaciones de locales -para lo cual tienen contemplado un monto de inversión de $800 millones-, además de una inversión en marketing, con el fin de reactivar las visitas y afianzar el negocio. El año pasado en Chile obtuvieron ingresos por cerca de $20 mil millones y ya para este año proyectan acercarse a los $22 mil millones.

Como parte de su estrategia, durante este mes el grupo reinauguró el local de Santa Brasa ubicado en Coquimbo, lo que se sumó a la remodelación del local de la misma marca ubicado en el casino Enjoy de Viña del Mar.

Sumado a ello, dos de sus apuestas relevantes para este año son la reconversión de dos locales. Uno es un local en el Mall Barrio Independencia de una marca de comida de carne, de ticket bajo, el cual se convertirá en un restaurante de comida peruana, también del mismo segmento, “aprovechando la importante presencia de migrantes en la zona”, dice Verme.

La otra apuesta, dice, y “que esperamos que salga súper bien es reconvertir nuestro local de Los Trapenses de La Nacional, a Pescados Capitales. Ahí estamos aprovechando que el centro comercial tiene un plan para salir a la calle lateral, entonces eso nos permite a nosotros tener una terraza bastante grande, ampliar nuestra cocina. A la marca le ha ido bastante bien, en 2022 se ha ido afianzando”.

Sumado a lo anterior, también se tiene planeada la remodelación del local de Santa Brasa del Costanera Center, el principal de dicha marca en el país.

“Son básicamente remodelaciones, lo que es bueno porque trae el tráfico y realmente nuestro otro objetivo es impulsar mucho marketing y traer más flujo de lo que tenemos en este instante”, asegura el ejecutivo, quien añade que el año 2024 será para retomar el crecimiento en número de locales.

En ese sentido, el ejecutivo cuenta que una tendencia que se ha visto en Perú es exportar marcas a Miami, lo cual es algo que también está en la mira del grupo. También explorar el mercado colombiano y ecuatoriano, pero todo en miras al 2024, una vez habiéndose afianzado más en Chile y Perú.

Si bien Chile es más pequeño en términos de población que Perú, el ejecutivo cuenta que las ventas en Chile son mayores por varios motivos, por ejemplo, el hecho de que en Chile los tickets son más caros. “Si se compara la cantidad de gente que vive en Lima moderna con Santiago moderno (sector alto de la capital) es mucha más la que vive en Santiago moderno, que además son personas con mucho más poder adquisitivo. Entonces al final se termina vendiendo para locales equivalentes mucho más en Chile que en Perú”, dice Verme.

Con respecto a la situación política de Perú, el ejecutivo asegura que el triunfo de Castillo en su momento ahuyentó inversiones de Perú. “Cambiaron los ánimos, empeoraron las expectativas, pero no necesariamente así la economía”. En ese sentido, asegura que fue un año bueno el 2022, lo que va de la mano con que “hace muchísimo tiempo que Perú tiene esta extraña historia de la economía y de la política caminando por cuerdas separadas”.

Ahora, con la salida de Castillo, el gerente y socio de grupo Civitano cree que los ánimos han cambiado, de manera positiva. “Como país es evidente que tenemos todavía temas por resolver. Más temprano que tarde tendremos elecciones nuevamente y esa será una solución política del problema actual que tenemos”.

En una vereda similar, con respecto a la situación de inseguridad que ha venido creciendo en Chile y la injerencia que podría tener en las inversiones, el ejecutivo señala que no es una situación que los preocupe. “En Perú, con el tema de seguridad, creo que estamos probablemente muchísimo más acostumbrados y preparados para lidiar por lo menos desde un punto de vista psicológico con eso”, dice y agrega que hasta el momento el grupo no ha tenido ninguna experiencia en Chile negativa y “esperamos que se mantenga así”.