Aracely Leuquén: "El proceso de instalación del nuevo gobierno va a ser complejo en Aysén"
La futura parlamentaria asegura que las demandas históricas de la zona deben ser prioridad para evitar movimientos sociales. La militante RN de origen mapuche espera poder armar una mesa de diálogo para tratar temas de los pueblos originarios.
Con orgullo dice ser nacida y criada en Aysén. La diputada electa de Renovación Nacional, Aracely Leuquén, asegura que en el Congreso espera convertirse en un puente para atraer la atención a las regiones como la suya, donde existe un "sentimiento profundo de postergación".
La futura parlamentaria, que previamente cumplió dos períodos como concejala, también quiere conformar una mesa de diálogo con los parlamentarios, que al igual que ella tienen ascendencia indígena, para tratar temas relacionados al os pueblos originarios.
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Algunos parlamentarios de su sector propusieron reponer la pena de muerte, ¿está de acuerdo con esa idea?
-Voy a no ser muy populista, pero sí muy categórica. Soy una defensora absoluta de la vida, en todas sus formas, sin ningún titubeo. Concuerdo plenamente con la premisa de justicia y no venganza. Nosotros hemos conocido delitos horrendos en el último tiempo que ponen a prueba, creo yo, nuestra humanidad, y esta última es la que debe prevalecer.
¿Y de la eutanasia?
-Tampoco. Absolutamente en contra.
En RN convergen diferentes posturas en temas valóricos, ¿cree que eso va a ser una dificultad para trabajar como bancada?
-Todo lo contrario. Contamos con la bancada más numerosa en el Congreso Nacional, y siempre el sello que ha marcado la diferencia en RN, a diferencia de otras colectividades, es la diversidad, el respeto y la tolerancia por las distintas opiniones. Lo importante es que estas posiciones políticas de cada uno tengan concordancia con el proyecto presidencial que representamos. El 17 de diciembre la gente eligió a Sebastián Piñera, eligió un programa de gobierno y sería de una ambigüedad absoluta hoy día estar en una posición contraria a lo que Sebastián Piñera se ha comprometido.
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Se ha considerado la idea de formar una bancada evangélica, a usted, que tiene ascendencia mapuche, ¿le gustaría participar en algo así?
-La verdad es que he estado participando en la conversación instalada. Siento que los temas regionales, los temas vinculados a las comunidades indígenas, los temas donde se deben responder a las minorías, tienen que ser abordados también en su justa medida. Sin embargo, yo veo muy difícil que parlamentarios de otros sectores logren tener una visión más integradora respecto a lo que significa el tema indígena en Chile. Lo lamento muchísimo. Hemos tenido la oportunidad, lamentablemente no hemos podido reunirnos. Debemos ser cinco o seis parlamentarios electos que tenemos ascendencia indígena y lamentablemente la prioridad para ellos han sido los temas ideológicos y políticos más que el afán de hacer una mesa de trabajo en pos de lo que representamos, especialmente en el ámbito cultural.
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¿En el Congreso ha faltado interés en los temas relacionados con los temas de pueblos originarios?
-Lo que hoy día hay es una gran oportunidad. Tenemos a parlamentarios de origen mapuche, a gente que representa el mundo étnico, entre los cuales me cuento. Siento que ahí va a haber una oportunidad de poder instalar una mesa de diálogo bastante interesante, siempre que tengamos la visión por delante de las comunidades indígenas y no de los colores políticos.
¿Cuáles son los temas pendientes de los pueblos originarios en el Congreso?
-Creo que todo lo que tiene que ver con aspectos culturales, con fortalecer nuestra identidad, con poder reivindicar derechos que son ancestrales, ciertamente que siguen siendo un tema pendiente en nuestro país. La verdad es que hay que tener una visión mucho más integradora respecto a lo que esto significa. No sólo abordar el tema de los pueblos originarios desde una perspectiva ideológica.
Aysén fue uno de los pocos lugares donde Sebastián Piñera no ganó las elecciones, ¿cree que debe ser uno de los lugares donde el futuro Presidente debe prestar atención especial?
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-Absolutamente. Todo lo que va a significar el proceso de instalación del nuevo gobierno va a ser complejo en Aysén, un lugar donde efectivamente no tuvimos un buen resultado. Pero esto es producto de un sentimiento de postergación, muy especialmente en las zonas extremas, Aysén y Magallanes, que fueron las regiones donde perdimos con nuestro candidato presidencial. Siento que el gobierno tiene que poner un ojo bien especial respecto a una política real de zonas extremas en el país y una mirada de regionalización importante.
¿Espera poder ser un puente para prestarle atención a esos lugares que están olvidados?
-Por completo. Regiones como Aysén y Magallanes, que tienen este sentimiento profundo de postergación, no hemos sido prioridad para el Estado. Los parlamentarios hoy en día tenemos que ser un puente que genere consensos, que llame al diálogo y a la conversación con todos los sectores.
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